Un ciudadano denuncia una agresión policial delante de sus tres hijos y su mujer

Un ciudadano marroquí, con Tarjeta de Permiso de Residencia en España, ha denunciado en el Juzgado de Instrucción número 4 de Melilla haber sido agredido por un agente de la Policía Nacional en la frontera de Beni-Enzar en presencia de sus tres hijos menores de edad y su mujer, además de haber sufrido abuso de autoridad y un delito contra la integridad moral de las personas. El agente de policía, a su vez, ha denunciado a este persona por atentado a la autoridad y resistencia. Sobre ambas denuncias, será finalmente la Justicia en Melilla la que tendrá la última palabra. Soulimane El Boutaibi, en su denuncia en el juzgado, señala que el pasado el pasado 13 de julio, sobre las 18 horas, cuando intentaba acceder por el paso fronterizo de Beni-Enzar a Melilla a bordo de su 4×4, que iba ocupado con su mujer y sus tres hijos, un agente de la Policía Nacional del que ha ofrecido su número de identificación, le negó el acceso a la ciudad. Según la denuncia, el agente argumentó que el vehículo, propiedad del denunciante, se dedicaba al contrabando, indicándole que debía de retornar a su destino de procedencia.

El denunciante preguntó al agente que cuál era el motivo del rechazo y afirmó que no le dio explicación alguna, cuando asegura que no se dedica al comercio atípico y que su única intención era entrar en Melilla con su mujer y sus tres hijos de turismo para realizar compras y tomar algo en la ciudad. Según expone, "el agente le mandó aparcar el vehículo, solicitándole toda la documentación, incluido su permiso de conducir, el cual no le ha sido devuelto, así como el agente procedió sin explicación a quitarle el terminal y empujarle contra la pared de la comisaría de la frontera de Beni-Enzar", imponiéndole una multa superior a los 300 euros.

Visto lo cual solicitó hablar con el superior jerárquico del agente. Dicho hecho, asegura, le fue denegado por el propio agente, procediendo a su detención y "engrilletamiento sin más motivo ni explicación, derribándolo al suelo, con una fuerza desproporcionada, sin que por parte del denunciante se halla ofrecido resistencia, sólo lo justo y preciso dada la brutalidad con la que el agente llevó a cabo la detención y puesta de grilletes, todo ello en presencia de sus tres hijos menores y su mujer" indica en la denuncia.

Revisar las cámaras
Una vez en la Jefatura Superior de Policía, debido a las lesiones que presentaba el denunciante, fue trasladado al servicio de urgencias de Atención Primaria de Melilla para que fuera reconocido y asistido de las mismas. Tras ser atendido por los servicios médicos de servicio de urgencias, le fue expedido un informe clínico, que recoge como diagnóstico "estado de ansiedad y algia en la muñeca derecha", al mismo tiempo que señala que "refiere presión de grilletes y puñetazo a nivel de parrilla costal".

Para la defensa del denunciante, dicho hechos pueden ser constitutivos de un delito leve de lesiones en concurso real de un delito contra la integridad moral de las personas, con claro manifiesto de abuso de autoridad por parte del agente de policía interviniente. De igual modo, ha señalado que por las lesiones y perjuicios sufridos, reclaman la indemnización que le corresponda.

Para sostener su reclamación, ha pedido al Juzgado que se oficie a la Jefatura Superior de Policía para que aporte la grabación de las cámaras de seguridad que se encuentran en el puesto fronterizo de Beni-Enzar del día 13 de julio de 2017 desde las 17.00 horas hasta las 20.00 horas.

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