En el aspecto individual, Alana Gonçalo y Conchi Satorre fueron las máximas anotadoras de su equipo con 18 y 17 puntos, respectivamente. El Melilla Sport Capital La Salle no pudo despedir ayer el curso 2020-2021 con una nueva victoria, la que hubiera supuesto la octava consecutiva, tras amargarle la fiesta el Real Canoe, que se apuntaba el triunfo, en el Pabellón Guillermo García Pezzi, por una diferencia de nueve puntos (66-75).
Las melillenses se veían sorprendidas en el primer acto, en el que las madrileñas se mostraban superiores, sobre todo en el rebote, y lograban marcharse al término de este periodo con una renta de once puntos (15-26). En el segundo acto el choque se niveló bastante más, una igualdad que quedaba reflejada en el parcial de este cuarto (19-19), con lo que al descanso las visitantes mantenían una cómoda ventaja en el marcador (34-45).
En la reanudación, las de Paulino Puerto se atascaban en ataque, lo que aprovecharon las jugadoras de la capital de España para abrir una importante brecha en el electrónico de hasta veinte puntos (38-58), una diferencia que se repetía en tres oportunidades más durante este tercer asalto, la última vez justo a la conclusión del mismo (48-68).
Las lasalianas no arrojaron la toalla y, con un tremendo esfuerzo defensivo, conseguían reducir la desventaja a nueve puntos (66-75), tras un parcial de 9-0 en los últimos seis minutos del partido y después de encajar solo siete en los diez minutos definitivos.
En el aspecto individual, Alana Gonçalo y Conchi Satorre fueron las máximas anotadoras de su equipo con 18 y 17 puntos, respectivamente.
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Un borrón que no empaña una gran temporada