Tarde “movida” para los servicios de emergencia por el temporal de viento

El temporal que ha llegado a la península, llamado Bruno, azotó también Melilla con rachas de viento que rondaron los 80 kilómetros por hora y que produjeron sendos destrozos a lo largo de la ciudad. Aunque no hubo que lamentar más que daños materiales, los bomberos tuvieron un día “movido”. El temporal de frío y viento que ha azotado a la península golpeó de forma violenta a Melilla a lo largo del día de ayer, especialmente por la tarde, obligando a los bomberos a acudir a un gran número de llamadas en los que declararon que fue “una tarde movida”.
Bruno, como se ha bautizado a esta tormenta, provocó múltiples daños materiales en diversos elementos del mobiliario urbano, produciéndose daños fachadas, losas caídas, cristales rotos, tejados arrancado, techos de uralita levantados, balcones que han sufrido desprendimientos y hasta cabinas de teléfono que se han visto dañadas, hasta el punto de que, a última hora de la tarde, los servicios de emergencias ya llevaban una decena de salidas, principalmente para atender desprendimientos.
Pese a los daños materiales provocados por las fuertes ráfagas de viento, que superaron los 80 kilómetros por hora y que mantenían a la ciudad en alerta por viento y fenómenos costeros, a lo largo del día de ayer no hubo que lamentar daños personales de ningún tipo.
Algunos de los desprendimientos que se produjeron en los balcones se dieron en pleno centro, como en la calle Ejército Español (donde se desprendió un hierro de un balcón), sobre la joyería Orly.
Todas las incidencias que los bomberos tuvieron que atender durante el día de ayer estuvieron directamente relacionadas con el viento y, “aunque no fueron gran cosa”, como manifestaron fuentes del cuerpo a este medio, les mantuvieron “liados” durante todo el día.

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