Somos Melilla ha visitado una vez más el barrio de La Cañada a petición de los vecinos para conocer su día a día y los problemas que enfrentan. El diputado y presidente de la formación, Amín Azmani, ha recorrido las calles del barrio acompañado por miembros de su Ejecutiva, afiliados, simpatizantes y vecinos que han guiado a la comitiva hasta las zonas más deprimidas del barrio.
Desde el partido aseguran que una vez más han comprobado el “abandono y dejadez total” por parte de una Administración pública, que sigue mirando hacia otro lado en lugar de preocuparse de los graves problemas que sufre este barrio.
Azmani ha explicado que La Cañada no necesita un centro cívico, tal y como se empeña el Gobierno local de Juan José Imbroda, sino solucionar las innumerables carencias en equipamiento urbano, accesibilidad, alumbrado, calzada, acerado, recogida de basuras y servicios básicos para los niños como parques infantiles.
Ludoteca Hércules calcinada
La formación ha visitado la Ludoteca Hércules, un centro donde mujeres y niños de entre 6 y 12 años recibían cursos de formación y alfabetización, que fue pasto de las llamas hace meses, según los vecinos. “Una ludoteca totalmente abandonada. Impacta ver cómo está quemada, llena de escombros y residuos. Eso demuestra el abandono y la dejadez por parte de la Administración pública”, ha lamentado Azmani, quien asegura estar sorprendido por el incendio en una instalación pública sin que el Gobierno haya dado explicaciones.
Desde Somos Melilla aseguran que todos los gobiernos que han pasado por la Ciudad Autónoma han “dado la espalda a La Cañada” y ha animado a los vecinos a no dejarse engañar por los de siempre. “¿Por qué permitís este maltrato por parte de los distintos gobiernos? ¿Por qué os creéis las falsas promesas de personas que cuando llegan al poder os abandonan?”, ha preguntado a los vecinos Azmani.
Estado de las pistas deportivas
La formación también ha visitado el campo de fútbol de La Cañada y sus aledaños, donde han podido ver el lamentable estado del césped, con agujeros, o las porterías que están a punto de caerse. Además, han podido comprobar de primera mano el “estado repugnante” de los vestuarios de la instalación y la ausencia total de empleados de mantenimiento y conservación.
El partido ha escuchado las quejas de los jóvenes, quienes aseguran que el alumbrado público no funciona, las redes del campo están agujereadas y crecen las malas hierbas sin control. El líder de Somos Melilla ha asegurado que esta visita, tres años antes de las elecciones, no es para pedir el voto, sino para dar la cara y poner voz a unos vecinos y un barrio totalmente abandonado.
Azmani ha aprovechado la ocasión para enviarle un mensaje al presidente Imbroda, quien “venía a La Cañada de noche a reunirse con determinados vecinos para pedirle el voto”.
“Este barrio necesita empleo, formación, mejoras de accesibilidad, alumbrado y un plan integral de reforma. Somos Melilla nos comprometemos a seguir dando la cara por este barrio y vamos a venir todas las veces que haga falta, para que el Gobierno no mienta y diga que este barrio no necesita nada”.
Por todo ello, Azmani le ha pedido a Imbroda que cumpla las promesas que les hizo a los vecinos durante la pasada campaña electoral.
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