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SATE pide el fin de la discriminación laboral de enfermeros y fisioterapeutas

El sindicato de enfermería SATE ha denunciado públicamente los agravios laborales que creen que sufren enfermeros y fisioterapeutas ante el colectivo médico, agravios que no responden a criterios objetivos y que deberían subsanarse para garantizar la salud del sistema público. Por ejemplo, critican que los médicos tengan la opción de firmar la exclusividad con el sistema público, a raxzón de 800 euros al mes, mientras que para otros colectivos ni se plantea. Además, el SATE propone que los enfermeros mayores de 55 años “salgan” de las rotaciones de turnos y fines de semana, y piden que se les reconozca como tiempo trabajado el “solape de jornada”. El Sindicato de Enfermería, SATSE, reclama a las distintas administraciones sanitarias públicas que acaben con determinados “agravios laborales” que perjudican a las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas, y que suponen “no tratar de manera justa e igualitaria a todos los profesionales del sistema sanitario público español”.
SATSE critica que algunas medidas con las que los servicios sanitarios han querido reconocer el desempeño laboral de sus profesionales solo beneficien al colectivo médico, cuando otros profesionales, como las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas, tienen el mismo derecho a beneficiarse de las mismas.
Uno de los agravios denunciados por el Sindicato de Enfermería es que los profesionales médicos cobran en torno a 800 euros más al mes por comprometerse a trabajar de manera exclusiva para el sistema sanitario público, algo que no solo no sucede con enfermeros y fisioterapeutas, sino que se les niega “de forma tajante”.
Precisamente por ello, la agrupación sindical solicita para estos profesionales la cantidad de 600 euros al mes (un 70% de lo que percibe el médico) por la adquisición del mismo compromiso.

Conciliación
Asimismo, el Sindicato de Enfermería considera que habría que posibilitar que a los enfermeros, una vez cumplidos los 55 años, se les libere de la imposición de realizar trabajo a turnos y en fines de semana. Esta medida supondría un “balón de oxígeno” para miles de profesionales que llevan décadas trabajando en rotación, “con los consiguientes problemas para conciliar su vida profesional y personal”, añade el sindicato.
Se da la circunstancia, además, de que a los enfermeros no se les reconoce como tiempo de trabajo el conocido como “solape de jornada”, un tiempo extra de en torno a 25 minutos en cada cambio de turno que sirve para la transmisión de la información clínica y organizativa más relevante e imprescindible para garantizar la continuidad de los cuidados en el proceso asistencial de cada paciente, algo que no afecta al personal médico.
“Si defendemos un sistema sanitario público justo y equitativo a la hora de dar asistencia a los ciudadanos […] sus profesionales deberían compartir unos mismos derechos laborales en lugar de hacer distinciones que no responden a criterios objetivos y que generan una discriminación y arbitrariedad injusta e inaceptable”, apuntan desde el Sindicato de Enfermería.