Quevedo niega las mejoras laborales en el contrato de limpieza: “El cambio es para hacer clientelismo”

El diputado local del PP Manuel Ángel Quevedo afirmó ayer que la finalidad del Gobierno de Melilla a la hora de cambiar los contratos de los servicios públicos de limpieza y mantenimiento de jardines con fondos covid no es para mejorar las condiciones laborales de parte de la plantilla, como alegó Coalición por Melilla (CPM), sino “para hacer clientelismo político” por parte de ese partido político. Quevedo salió al paso de las declaraciones del consejero de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Hassan Mohatar, y del presidente de CPM, Mustafa Aberchán, acusando al PP de estar en contra de la mejora de las condiciones laborales de más de un centenar de trabajadores con contratos precarios.
Quevedo dijo que “eso es falso” porque esas mejoras, ya sea en cuanto al sueldo o las horas de trabajo, dependen de los convenios colectivos entre las empresas y los trabajadores, al tiempo que aseguró que fue el PP el que, cuando estaba en el anterior Gobierno, propició dicha mejora con la adjudicación del nuevo contrato.
“CPM no sube los sueldos. El PP sí los subió a todos los trabajadores”, señaló Quevedo, exconsejero de Medio Ambiente, al recordar que, ante dicha adjudicación, se incluyó en los pliegos de condiciones la obligación de la empresa de pagar a la plantilla la bonificación a la Seguridad Social, lo que permitió una subida salarial de unos 60 euros mensuales en el caso de los peones especialistas.

“90 en un año con el PP”
Asimismo, en cuanto a la precariedad laboral de aquellos empleados que trabajan un día a la semana por 110 euros al mes, según manifestó Hassan Mohatar, Quevedo negó que fueran 112, como este dijo, sino que son solo 5 también por la bolsa de 1.800 horas extraordinarias incluida en el pliego de condiciones por el anterior Gobierno.
Así, apuntó que, desde julio de 2018, que empezó el nuevo contrato, a junio de 2019, cuando se produjo la salida del PP del Gobierno, la cifra de trabajadores que estaban en esas condiciones, como consecuencia de un convenio colectivo en 2014 entre la empresa y los sindicatos, pasó de 124 a 35 y, con el actual Ejecutivo, ahora quedan solo 5 en esa situación.
Por lo tanto, subrayó que, con el PP, los trabajadores en esas condiciones precarias descendieron en 90 en un año y, con CPM al frente de la Consejería de Medio Ambiente desde hace año y medio, “solo en 30”.
A ello se une el hecho de que “el argumento de que cobran 112 euros al mes se cae por su propio peso porque estaría por debajo del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y el convenio está por encima”, dijo Quevedo.

“Serán allegados de CPM”
Por todo ello, insistió en que “el sentido que tiene este asunto es el clientelismo político” y recalcó que los 3.350.000 euros de fondos covid que se han destinado al contrato de la limpieza no se van a destinar a ninguna mejora, sino a contratar a 130 personas que, según el PP, serán “allegados de CPM”. “Nadie lo duda”, afirmó.
De hecho, recordó que los cepemistas “no responden” cuando se les pregunta cómo van a ser contratadas estas personas, por medio de qué procedimiento, los requisitos que se exigirán y dónde deben dirigirse los interesados a optar a alguno de estos puestos. “Lo mismo ocurrió con los 60 del centro de menores de Rostrogordo”, aseveró.
Por último, puntualizó que el PP siempre va a apoyar la creación de empleos, siempre que sean “necesarios y productivos”, ya sea en el ámbito público o en el privado, y que “intereses a la vida de los ciudadanos”, algo que, en el contexto de la pandemia, “podrían haber sido muchos”.
No es el caso, según Quevedo, de los del contrato de limpieza y el de jardines, ya que van a entrar a trabajar en breve 160 trabajadores de los planes de empleo, que se unen a los 140 contratados por la Ciudad Autónoma con los fondos covid. “Es un verdadero disparate que entren 300 personas de la noche a la mañana para lo mismo”, aseveró.

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