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¿Qué utilidad tiene la Delegación del Gobierno?

La frontera incorporará a partir del 3 de enero, la semana que viene, medidas para intentar agilizar el tránsito de personas desde Melilla hacia Marruecos. Medidas a las que se ha comprometido el gobernador de Nador y que pasan por habilitar más carriles, hasta alcanzar un total de cuatro, y priorizar el paso de personas vulnerables que no pueden quedarse atrapadas durante horas en una cola de espera, como son las mujeres embarazadas, personas con movilidad reducida y enfermos. También los vehículos de dos ruedas tendrán su propio carril específico para poner fin a otra de las problemáticas, que era el perjuicio que los conductores de turismos sentían al verse adelantados por motos, ciclomotores y bicicletas, ralentizando su circulación por los controles de seguridad. A priori, todos contentos, porque estos vehículos también pedían su propio paso específico. Y mientras estas medidas se implantan, habrá un canal de comunicación para avisar de las grandes retenciones para que, al otro lado de la frontera, las autoridades marroquíes intenten darles solución o, al menos, dar una mayor celeridad al tránsito.
Cualquiera que no haya leído la noticia ayer podría pensar que estas decisiones son fruto de un diálogo y entendimiento entre autoridades de España y Marruecos, países que se dicen amigos y que, no lo olvidemos, en abril firmaron un acuerdo en el que decían iniciar «una nueva etapa». Pero no. Estas medidas son un compromiso del gobernador de Nador después de que un grupo numeroso de melillenses se hayan concentrado allí, delante de su sede, pidiendo soluciones a unas colas que ya todo el mundo califica como «inhumanas», y que el pasado día 23, víspera de Nochebuena, fueron la gota que colmó el vaso de la paciencia de miles de melillenses.
Y ante ello, la gran pregunta es qué hace nuestra Delegación del Gobierno de puertas para afuera. ¿Cómo es posible que hayan conseguido bastante más melillenses particulares con una simple protesta, que nuestra delegada del Gobierno o Ministerio de Asuntos Exteriores en todos estos meses desde que reabrió la frontera? ¿Sirven para algo estas instituciones, si son los propios ciudadanos los que tienen que buscarse la vida para arreglar un problema que les afecta? Si el gobernador de Nador cumple con su compromiso y el 3 de enero empiezan estas medidas para agilizar la frontera, Sabrina Moh va a dar pasos agigantados hacia la consolidación de una idea que cada vez más melillenses tienen interiorizada, y es que ostenta un cargo totalmente prescindible porque no sirve para lo importante, que es arreglar los problemas reales, desde que ella lo ocupa hace ya casi cinco años. Es lo que tiene estar más pendiente del marketing y el escaparate que de la cruda realidad.

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