El PSOE de Melilla ha pedido retirar la estatua de Franco de Melilla para que la ciudad “no sea el último vestigio del fascismo en Europa” porque lo que sus habitantes quieren es “una ciudad moderna, europea, del siglo XXI”. Tras cumplirse anteayer 42 años de la muerte de Franco, el secretario de Política Autonómica y Municipal del PSOE local, Francisco Vizcaíno, recordó que Melilla fue condenada en octubre de 2016 por incumplir la Ley de Memoria Histórica.
“Somos, por desgracia, la ciudad con mayor número de calles y símbolos anticonstitucionales, y tenemos el dudoso honor de contar con la última estatua de Francisco Franco en el mundo ubicada en un espacio público”, lamentó Vizcaíno en rueda de prensa.
Estatua al dictador
Dijo no entender que el Gobierno del PP abogue por la conservación de esta estatua “de un dictador que reprimió a toda España durante 40 años” alegando que se trata de un homenaje por la defensa del Melilla en 1921, “pero es falso”.
Vizcaíno leyó la moción aprobada por el Ayuntamiento de Melilla el 4 de diciembre de 1975, según la cual la estatua responde a “la limpia y brillante trayectoria de nuestro Generalísimo” y dejaba claro que pretendían mostrar la “gratitud” de la Corporación por su “sabia, inteligente y recta labor de gobierno realizada a lo largo de casi 40 años de regir los destinos de la Patria”.
“El Pleno de 1975 decide la construcción de un monumento a Franco como caudillo y dictador”, recalcó el dirigente del PSOE, que insistió en que “Franco fue un dictador y no debe estar como monumento en las calles de una ciudad”.
A su juicio, “es imposible pensar que pongan una estatua de Hitler en Alemania por su actuación en la Primera Guerra Mundial y nadie se plantearía en Rusia que se recuperaran las estatuas de Stalin, por mucho que venciera a los nazis”.
“Melilla es la ciudad con más vestigios franquistas de toda España”, lamentó Vizcaíno, que pidió que se retire la estatura del dictador, instalada a la salida del puerto, y sea donada a un museo.
“Franco cuenta con miles de españoles represaliados, con asesinatos firmados de su puño y letra hasta pocos días antes de morir. No queremos que presida una estatura de él en la salida del Puerto”, concluyó.
