Óscar Gaztelumendi, secretario de Organización de Podemos Melilla
Unidas Podemos ha pedido la disolución del Consejo de Administración de TV Melilla por su “inoperancia” ante los supuestos casos de acoso laboral revelados por el delegado de personal de CC.OO. del ente público.
Óscar Gaztelumendi, secretario de Organización del partido en Melilla, asegura que el Consejo de Administración, máximo órgano de decisión de la empresa, tiene entre sus facultades “la buena administración y gobierno de la sociedad, tal y como figura en sus estatutos”.
“Está claro que el Consejo ha sido ciego, sordo y mudo todo este tiempo. La presidenta, Elena Fernández, y sus integrantes, consejeros propuestos por CpM, PSOE y Eduardo de Castro, no han estado al nivel requerido. Hay un grave incumplimiento de sus funciones”, denuncia, considerando “materialmente imposible” que dicho órgano no estuviera enterado de “las masivas bajas psicológicas del personal o de sus peticiones de auxilio ante una situación insoportable”.
Es por eso por lo que el partido propone a la Junta de Accionistas de TVMelilla que “cese a todos los consejeros, incluida a su presidenta, y que la empresa sea temporalmente gestionada por un administrador único de consenso hasta las próximas elecciones”.
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Sánchez, Podemos y la impostura. No les importan los adolescentes:
En la crítica radical e ideología capitalista Marx prescribe con meridiana claridad toda la praxis que con posterioridad han ejercido sus «hijos»:
«los filósofos no han hecho nada más que interpretar de diversos modos el mundo, pero lo que se trata es de transformarlo».
Podemos, en su habitual desprecio a todo lo que no sea de su ideario marxista, es un buen ejemplo de la voluntad de imponer «su revolución», como prescribe su ideología, claro: la «transformación social».
Desprecian los miembros de una sociedad: son solo «instrumentos útiles». Las personas solo somos un número.
Lo importante es el fin, el medio es totalmente prescindible. Ee esta forma de actuar se «necesita» eliminar cualquier residuo de sentimiento a los demás. Lo «imprescindible» es realizar esta cambio.
Sí hace falta actúan sin escrúpulos.
Por eso lo que pase a las mujeres no les ha importado jamás. Tampoco lo que les pueda pasar a los adolescentes con sus leyes trans.