La secretaria general de Unidas Podemos Melilla, Gema Aguilar, considera que la consejera de Educación, la socialista Elena Fernández Treviño, está realizando una gestión “ineficiente e ineficaz” de la partida de 1,7 millones de euros que ha recibido para la lucha contra la brecha digital, porque aún no se han facilitado estos recursos para permitir a alumnos de familias sin recursos poder recibir educación online. Manifiesta Gema Aguilar que la Ciudad Autónoma ha recibido 1,7 millones de euros del fondo no reembolsable para la adquisición de ordenadores y tabletas al objeto de asegurar que todas las familias con hijos en edad escolar “tengan acceso a Internet, ya sea pagando wifi o con tarjetas con limitada capacidad de descarga”.
Gestión
Pero asegura que la gestión que está realizando la Consejería de Educación con este fondo “es ineficiente e ineficaz”. El motivo es que, aunque ha comenzado noviembre, “no tenemos los recursos disponibles ni para los niños confinados por tener un contacto estrecho o por haber dado positivo en covid, ni para el resto de los ciudadanos ante un confinamiento total que, desgraciadamente, no es descartable ante la situación tan alarmante de los datos de covid en Melilla”.
Se lamenta la secretaria general de Podemos en Melilla que “una vez más, la Ciudad Autónoma se pone a trabajar cuando tiene los problemas encima, y todo el trabajo que haga ahora es poco”, y añade que “la falta de capacidad para prevenir escenarios ha tenido paralizada a la Consejería de Educación”. Critica que aún “no ha realizado la compra” de estos materiales, “sino que ha delegado en los centros educativos la adquisición de estos recursos tecnológicos, con lo que se retrasa considerablemente el proceso de adquisición”.
Considera que la Consejería “desatiende sus obligaciones” y entiende que, como administración, le resultaría más sencillo hacer una compra general y al mismo tiempo, podría negociar con las empresas tecnológicas para que “ninguna familia se quede sin internet, es decir, hubiese sido una compra eficiente y eficaz, pero delega su responsabilidad en los centros”.
No entiende Gema Aguilar que para que los centros reciban la ayuda que precisan para la compra de este material para impartir sus clases de forma telemática, “como requisito se solicite, para su valoración, un proyecto sobre el desarrollo de las clases online”.
“De igual modo que no se pide un proyecto para dotar a los centros de pizarras digitales y de otros materiales didácticos, no se entiende que se les pida para dotarlos de ordenadores, tabletas y acceso a internet, si es que se está convencido de que hoy son recursos indispensables en los centros educativos”, manifiesta.
Aguilar indica que la consejera de Educación “parece olvidar en la convocatoria, la inclusión de criterios de carácter socioeconómicos, para posibilitar que el reparto del dinero destinado a la subvención ayude a hacer realidad los principios de igualdad, equidad y compensación educativa, permitiendo con criterios de transparencia, asignar mayor cantidad económica a los centros ubicados en los barrios más deprimidos de nuestra ciudad”.
Brecha digital
En opinión de Podemos, la consejera de Educación “muestra un alto desconocimiento sobre la brecha digital de la ciudad, pues de lo contrario hubiese realizado la compra de estos materiales”. También señala que “no hubiese incluido dentro de los requisitos, la valoración de un proyecto educativo online” para que cada centro “reciba la asignación económica”. Gema Aguilar denuncia que hay muchos estudiantes que “no cuentan con los recursos” para poder seguir las clases telemáticas, niños y niñas a los que les ha supuesto “un daño grave en su educación el confinamiento previo”.
“Si la estrategia utilizada por la consejera de educación para el reparto del 1.671576,63 euros, para impulsar la competencia digital en los centros educativos de Melilla, en igualdad de condiciones para todos, ha sido la adecuada, el alumnado, las familias y el profesorado, en unos meses podrán valorarlo”, añadió. Aguilar confía en que la consejera facilite a los centros la adquisición de los materiales que precisan para que “ante un confinamiento total, nadie se quede sin poder desarrollar sus clases online”.
