Nombres…

Supongo que en principio sería un uuuh uuuh, luego señalando con un dedo, después sería eso de tú y yo; más tarde nos pondríamos por nombre, tronco, corteza, sardina, carnero, tejedor, vaca y así sucesivamente hasta llegar el sapiens y decir Adán, Eva y su prole, nosotros. Luego vino lo de Emmanuel, Abraham, José, Jesús, Pedro, Juan, Mateo, y Mohamed. Hasta ahí, más o menos, por aquella historia universal o religiosa, sabíamos de nuestros ancestros. Por supuesto incluidos los que anduvieron a gatas, luego más altivos simios y pasando al erectus, (seguimos haciendo el mono). Bueno, se me olvidaba la molécula. Y ahí está el lío, quién era quién, si el huevo o la gallina. No obstante, dadas mis vivencias, me encontré en su día con los John Oyenkwere, John Emeagi, John Ogozi, Etin Udo Udo, Malam Bukara, Emmanuel, y dentro de esta sociedad, otros que en este momento no recuerdo. Lo curioso es que recuerdo sus caras, sus modales, su educación, su rendimiento y de alguna manera por sus circunstancias "palaciegas", decididos agradecidos. También tenemos aquél de origen indo africano, Ali Mama, autónomo él con su factoría; buena persona. Pero hay algo que con la juventud, no se me ocurrió indagar; y era el que querían decir sus apellidos. Fatal error, hubiese aprendido más. El ejemplo lo tenemos en mis dos apellidos, quién no sabe que es una parra determinada, un pueblo de Cuenca (La Parra de las Vegas). Y quien no sabe que es un ripio; un verso malo, restos de algo, de piedras para una pista, etc. Lo curioso es que hay una Virgen de Ripio, que es una pedanía de Ripoll (Ripio), Gerona. Pero de mi abuelo materno Ramón, me dicen era leones, León. O sea que, aún no sé, de donde era mi abuelo materno. Al final va a resultar que soy del Barça.

Luego vinieron los fang (pamues) con sus Obiang, Nguema, y otros que, fatalmente tampoco grabé en mi memoria. Aunque si recuerdo a José Obiang Nsué, que me vendió la ballesta de caza de su abuelo, su carcaj y flechas. Por cierto que tengo que buscar donde están las dos últimas piezas. Luego tenemos el de los bubis y annoboneses. Estos últimos, tenían nombres mezclados o no, como el joven pintor de acuarela, Agustín Pueyo Dueso, y del cual tenemos alguna obra. Su deseo entonces era el irse a Barcelona; menos mal que no era del Barça. O aquél otro de nombre Majeda, ya él de cierta edad y buen administrativo.

A qué viene a cuento todo esto. Sencillamente, tenemos que aprovechar la existencia de los afro sub, y veamos de estudiar su historia y su memoria no contaminada. Creo que aprenderemos bastante en cómo desarrollar sus pueblos de procedencia, sin contar con los reyezuelos de la guerra. Ni los aprovechados financieros o los especuladores, todos ellos ventosas contra la humanidad. Pero sobre todo, sabremos quiénes son; si vagos, maleantes, albañiles, estudiantes, trabajadores, titulados o quizá guerrilleros huidos o simplemente trotamundos con dinero. Supongo que les harán análisis exhaustivos, no nos vayamos a encontrar con un Évora, Por ejemplo; habría que indagar bien y extraer unas realidades, más o menos ocultas, cultas o incultas. Para que los humanistas y políticos, sepan el porqué del trabajo de las fuerzas de seguridad, y como es el de la Guardia Civil, al pie del cañón.

De Guinea, salimos bajo el amparo de esta Guardia Civil. Y en Bata (Río Muni) embarcó la población civil blanca y negra, entre dos columnas armadas de campaña, apostadas dejando un pasillo al civil ¡precisamente!, por nuestra Guardia Civil. Así que, menos traiciones encubiertas con otras pamplinas muy interesadas, que son personales o políticas. Que están cubriendo al ciudadano español. Y aunque hayan pasado 45 años, seguirán dándonos los mismos servicios que son siempre, de protección; incluso a los contra vinientes de nuestro orden y leyes. Por eso, no me explico que no se vea por "ciertos interesados e intereses" que son descendientes de esas fuerzas militares o civiles. Cuando la realidad de lo que es la protección del Estado que formamos todos, los de buena fe, dentro del corral de nuestras fronteras. Y no nos olvidemos de los que están y han estado en la lucha antiterrorista… ¡Mala memoria, eh! Que también entran de fuera, y sin saltar vallas (11 M).

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