Mohatar confía en que en las próximas semanas pueda estar disponible el cuarto módulo de la desaladora

El titular de Medio Ambiente lamenta los «muchísimos problemas» que está provocando dicha instalación tras las últimas averías en la planta y asegura que se está reparando sin parar

El consejero de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Hassan Mohatar, ha lamentado los «muchísimos problemas» que está provocando la Planta Desalinizadora de la ciudad después de que el pasado domingo dicha instalación sufriera dos averías, una de origen eléctrico que produjo la paralización de la planta, y otra en una fuga en la tubería de impulsión de agua que conecta con los depósitos generales de abastecimiento. Unas averías que, tal y como asegura, no ha acabado con la vida de dos trabajadores » de auténtico milagro».

Según explica, dicha rotura en la avería ha provocado que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) parase el suministro de agua y arreglase dicha avería, procurando que las restricciones en el suministro de agua fuesen «los mínimos», de apenas unas horas. «Es cuestión de una avería, de una desaladora, de la que se está trabajando sobre ella sin parar, es un problema y está provocando algunas restricciones en el suministro de agua», explica, dejando claro que se trata de una cuestión que no depende de la Ciudad Autónoma, sino de la CHG.

Así pues, espera que en las próximas semanas pueda estar disponible casi en su totalidad el cuarto módulo de la desaladora y que se vayan evitando «poco a poco estas molestias a los ciudadanos» en «un bien necesario» como es el agua. Asimismo, lamenta que la Ciudad tenga que depender de la desaladora para abastecerse de agua.

A preguntas de los periodistas, Mohatar aclara que la Ciudad no puede hacer «ninguna auditoría» de las averías que se producen en la desaladora «porque no es nuestra». «En el momento en el que nos la transfieran cuando termine la construcción del cuarto módulo y la renovación de la instalación tendremos que hacer una auditoría para saber realmente cuáles son las condiciones», afirma, agregando que CHG apunta el origen de dichas averías por la antigüedad de la planta y por el escaso mantenimiento que ha tenido dicha instalación, así como por «la dejadez» y «desidia» que se ha tenido durante muchos años en la cuestión del agua.

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