Miles de personas vuelven a protestar en Alhucemas para exigir la liberación del activista Nasser Zefzafi

Miles de personas han salido a última hora de este viernes a las calles de la localidad marroquí de Alhucemas, en el norte del país, para exigir a las autoridades que liberen inmediatamente al activista Nasser Zefzafi, emblema de las últimas manifestaciones en la localidad tras la muerte de un pescador en octubre, cuando intentaba recuperar su pesca confiscada por la Policía. Zefzafi, acusado por las autoridades de "poner en peligro la seguridad nacional", fue arrestado el lunes y desde entonces la población ha protagonizado diversos actos de protesta en el norte del país.

La última de ellas tuvo lugar ayer por la noche en la plaza de Sidi Abed, en la ciudad costera, donde miles de personas se concentraron al grito de "Todos somos Zefzafi", con las bocas tapadas con cinta adhesiva para protestar contra las autoridades marroquíes.
"Nasser defendió sus derechos, defendió nuestros derechos. Es nuestro héroe", ha declarado una de las participantes, Zahya, madre de cuatro hijos.

En respuesta, la Policía ha desplegado un importante contingente alrededor de la plaza para impedir la llegada de más gente, después de que en la cercana localidad de Imzouren, los antidisturbios emplearan cañones de agua para dispersar a manifestantes que les lanzaban piedras y desperdicios.

La muerte en octubre del pescador Mouhcine Fikri — aplastado por un camión de basura cuando intentaba recuperar los peces que le había confiscado la Policía — se ha convertido en un símbolo de las frustraciones de la población y reavivado al movimiento 20 de febrero, que protagonizó varias protestas en 2011 hasta que el monarca Mohamed VI decidió ceder algunas de sus competencias.

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