Melilla, la segunda región con menos movilidad de parados de España

La Estadística de Movilidad Laboral y Geográfica del Año 2014, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), ha revelado que Melilla, con un 91,6 por ciento, es la comunidad con menos movilidad de parados de España. A la cabeza está Ceuta, con un 98,7 por ciento, y en tercer lugar se sitúa Andalucía, con un 87,6 por ciento. las regiones más dinámicas en cuanto a movilidad laboral son Navarra, con un 67,3 por ciento; Cataluña, con un 74 por ciento; y Cantabria, con un 77,1 por ciento. En Melilla, el porcentaje de ocupados que han cambiado de municipio se queda en el 84,1 por ciento. Melilla, con un 91,6 por ciento, es la segunda da comunidad con menos movilidad de parados de España, según la Estadística de Movilidad Laboral y Geográfica del Año 2014 hecha pública por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

A la cabeza está Ceuta, con un 98,7 por ciento, mientras que Andalucía, con un 87,6 por ciento, es la tercera comunidad autónoma en la que los desempleados se mudan menos para poder trabajar.

En el lado contrario, es decir, las regiones más dinámicas en cuanto a movilidad laboral son Navarra, con un 67,3 por ciento; Cataluña, con un 74 por ciento; y Cantabria, con un 77,1 por ciento. La media nacional es del 81,4 por ciento.

Por su parte, la comunidad con mayor movilidad geográfica, medida en términos de porcentaje de ocupados que han cambiado de municipio de residencia, ha sido Ceuta, con un 91,7 por ciento. Le sigue el Principado de Asturias, con un 90,3 por ciento. En tercer lugar se sitúa Extremadura, con un 89,9 por ciento. En Melilla, el porcentaje de ocupados que han cambiado de municipio de residencia se queda en el 84,1 por ciento.

A nivel general, la movilidad geográfica de los ocupados se ha incrementado con respecto al año anterior. Así, el 2,5 por ciento de los ocupados del primer trimestre de 2014 ha cambiado de municipio de residencia hace menos de un año. Esta cifra es superior a la registrada en 2013 (del 2,3 por ciento), lo que interrumpe la tendencia descendente registrada desde 2010.

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