Melilla tendrá una planta de tratamiento de residuos, evitando así su traslado a la península para realizar esta labor, gracias a una inversión de unos 3,8 millones de euros que será financiada, la mayor parte, por la sociedad pública Remesa, junto con 800.000 euros de los Fondos de Biodiversidad.
A preguntas de los periodistas, el consejero de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Hassan Mohatar, explicó que esta planta de transferencia permitirá ampliar el punto limpio que está a punto de entrar en funcionamiento, a falta de que los contenedores sean calibrados e instalados.
Según Mohatar, el punto limpio será inaugurado en cuestión de pocos días, posiblemente esta misma semana o la próxima, aunque ya se está trabajando en su ampliación con la creación de esta planta de tratamiento de residuos, que dará “un salto cualitativo en el reciclaje” por parte de la Ciudad Autónoma.
Supondrá, en palabras del consejero, “una mejora importantísima o complementaria al punto limpio” y evitará el traslado de los residuos para su tratamiento en Melilla, separándolos e intentando recuperarlos y darles una segunda utilidad, dentro de la “política de compromiso” de la Consejería de Medio Ambiente con el reciclaje y el cuidado medioambiental.
Mohatar indicó que el anteproyecto está ya definido y ahora habrá que sacarlo a licitación, a través de Remesa, para la redacción del proyecto definitivo y su construcción.
