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Más de 40 alumnos del Miguel Fernández aprenden viajando por Castilla La Mancha

Una de las mejores inversiones para el aprendizaje de cualquiera es viajar, y si a eso se le añade que ya se ha visto en clase y se ha estudiado, mejor que mejor. Esta situación la acaban de vivir 46 alumnos del instituto melillense “Miguel Fernández”, que se sumergieron, desde el pasado 5 de marzo hasta el 10, en un proyecto académico titulado “En un lugar de la Mancha”, organizado por el departamento de Lengua y en el que visitaron diferentes puntos claves de Castilla La Mancha, teniendo unos días lúdicos pero también didácticos con todo lo que vieron en sus visitas.
Los alumnos de los cursos de segundo y tercero de la ESO, junto con sus profesoras de lengua, visitaron diversos lugares como las Tablas de Daimiel, Villanueva de los Infantes, Almagro, las Lagunas de Ruidera, el Viso del Marqués, etc.; lugares que les han trasladado a la época del siglo de Oro y demostrando los conocimientos obtenidos en las aulas sobre figuras tan relevantes como Quevedo, de escenarios tan importantes como el único corral de comedias que se ha mantenido con el paso del tiempo en la localidad de Almagro o espacios naturales tan impresionantes como las Lagunas de Ruidera o las Tablas de Daimiel.

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Pero los alumnos no solo tuvieron la suerte de poder realizar un taller de teatro que les permitió dejar volar su imaginación, creatividad y el gusto por las artes escénicas o asistir a la representación de la obra clásica de Moratín ‘El médico a palos’, sino que tras su vuelta de estar por tierras de molinos y gigantes, todos los alumnos pudieron disfrutar de una de las ciudades más emblemáticas de las tierras andaluzas, Granada.
Antes de regresa a la Ciudad Autónoma, el grupo de estudiantes estuvieron visitando como últimos puntos de su viaje educativo La Alhambra y sus alrededores, el Parque de las Ciencias y su Biodomo y Planetario, poniendo así un broche de oro a un viaje que deja buenas sensaciones y perspectivas optimistas en el centro educativo.
Finalmente, ‘Disfrutar aprendiendo’ fue el lema que se empleó en esta experiencia que, en palabras de los docentes, “les servirá de motivación extra para afrontar la última etapa del segundo trimestre”.