Los residentes del CETI relatan el proceso migratorio y sus anhelos a través del arte

La Sala de Exposiciones del Real Club Marítimo de Melilla acoge desde ayer una muestra cultural compuesta por obras artesanales y otras expresiones artísticas elaboradas por los residentes del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Melilla, centradas en el proceso migratorio y sus anhelos. El director general de Migraciones, Ildefonso de la Campa, y el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, acudieron ayer a la inauguración de esta exposición, denominada “Raíces”, que se mantendrá abierta hasta este viernes, en horario de 10.00 a 14.00 horas, y de 17.00 a 21.00 horas. Las dos asociaciones que trabajan de cerca y a diario con los residentes del centro migratorio, Melilla Acoge y Accem, se han encargado de la organización de esta exposición, en la que se puede contemplar el resultado de estos talleres voluntarios. Los inmigrantes que participan en ellos son los autores de las obras expuestas, entre las que se pueden encontrar vestidos, bordados, pinturas sobre cerámica, montajes fotográficos, disfraces, y caricaturas, entre otras.
La parte de la exposición que ha montado Melilla Acoge es fruto del programa “Welty” que desarrolla en el CETI, que significa “satisfacción” y procede del bámbara, según explicó a MELILLA HOY la responsable de la asociación, Isabel Torrente.
El objetivo de este programa es que los inmigrantes que llegan a Melilla se sientan a gusto consigo mismos y se puedan crear en el CETI espacios de confianza en los que se pueda trabajar, favoreciendo competencias personales, sociales y laborales como “un paso más en el largo camino” que emprendieron al emigrar.
Una de las partes más vistosas de la exposición es el resultado del taller de costura, en el que los residentes han confeccionado varios vestidos que representan sus lugares de procedencia.
El vestido de Siria representa en su falda las siete puertas de la muralla de Alepo y lo que evoca a sus autores el olor a jazmín que impregna su lugar de origen, mientras que el de Libia mezcla sus modernos edificios con el espíritu de libertad mediante pájaros, y el de África es de color amarillo, que simboliza el sol del continente.
Otros de los elementos expuestos reproducen un salto a la valla, el papel protector de las madres que migran hacia Europa con sus hijos y cómo los niños huyen “de mano en mano” de la guerra en sus países, para lo que los inmigrantes han utilizado expresiones artísticas como dibujos, pinturas y bordados.

Proceso migratorio y anhelos
De esta manera, la cultura se convierte en un vehículo para que los inmigrantes puedan explicar el proceso migratorio, algo que les resulta muy difícil hacerlo de forma verbal, no sólo por la barrera del idioma, sino también por el dolor que les suponen las experiencias vividas en el camino.
Parte de la exposición muestra también los anhelos personales y las esperanzas de los inmigrantes, y también los conocimientos que muchos de ellos traen en el ámbito artístico, como se pueden observar en varios de los trabajos, como los dibujos de un residente que es caricaturista y las fotografías tomadas en diferentes puntos de la ciudad.
“Con la creación artística, y trabajando a través de la identidad y el sentimiento de pertenencia, vemos qué cosas pueden ir saliendo. Aquí evocan sus raíces y el deseo de qué quieren en un futuro”, apuntó Torrente.
Buena parte de la exposición está compuesta por elementos que conformaron la muestra de la IX Semana Multicultural que el CETI de Melilla celebró este verano en sus instalaciones, pero de esta manera se abre al resto de la ciudadanía, lo que también busca como objetivo ahondar en la integración social de los inmigrantes en la ciudad.

Mucho empeño
La asociación Accem, que en el CETI desarrolla la formación en lengua y cultura española y el ocio y tiempo libre en todos los grupos de edad, también ha montado una parte de la exposición escenificando las actividades que llevan a cabo dentro y fuera del aula. La responsable de Accem, María del Águila Lara, destacó la voluntad de todos los alumnos, que han participado de manera voluntaria y han puesto “mucho empeño” en ello.

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