La Feria de Melilla dedicó ayer su día de forma muy especial a los más pequeños. Al precio rebajado de las atracciones infantiles, se sumaron los dos conciertos que ofrecieron Cantajuegos en la Caseta Oficial. En ambos pases, las entradas se agotaron el día en que se pusieron a la venta. Pero no fue un concierto más, sino que fue solidario: Una entrada a cambio de dos kilos de alimentos. La Viceconsejería de Festejos ya informó el viernes de la semana pasada de que las 1.800 entradas puestas a la venta para las dos funciones de Cantajuegos se habían agotado en apenas dos horas. Así pues, no es de extrañar que los niños melillenses disfrutaran de los dos pases que ofrecieron Cantajuegos, uno a las 19.00 y otro a las 21.00 horas. Fue además el espectáculo más solidario de la Feria de Melilla. Y es que las entradas se cambiaron por dos kilos de comida. El resultado final, 4.000 kilos de comida que serán repartidos entre Cáritas y el Banco de Alimentos.
Los más pequeños, acompañados de sus familiares, se dieron cita en la Caseta Oficial de estas fiestas patronales para cantar y bailar al son de las canciones de los Cantajuegos, que enlazaban las canciones con pequeñas historias que encandilaron a los niños melillenses.
Pero no era de extrañar. Desde el año 2007, más de 950.000 en más de 500 funciones han disfrutado de la música y el movimiento para poner en funcionamiento la imaginación y la fantasía de los más pequeños de la casa. Ayer fue un día de Feria para ellos, los niños.
