Los azulones tropiezan de nuevo en la misma piedra

Lo cierto es que el decano jugó a un gran nivel frente a los vitorianos durante dos cuartos, pero tras el intermedio se verían superados por los de Antonio Herrera, perdiendo finalmente por cinco puntos. El Melilla Baloncesto dejaba ayer escapar otro importante encuentro en casa, y ya es el cuarto en lo que va de temporada, un tropiezo ante el Sáenz Horeca Araberri que puede costarle muy caro a los melillenses de cara a clasificarse para los play off y también para hacerse con un buen puesto con vistas a las eliminatorias de ascenso.
Lo cierto es que el decano jugó a un gran nivel frente a los vitorianos durante dos cuartos, pero tras el intermedio se verían superados por los de Antonio Herrera, perdiendo finalmente por cinco puntos (77-82).
Los azulones habían tenido una salida fulgurante, con un 11-0 de parcial y ofreciendo una gran nivel defensivo, consiguiendo que los vascos no pudieran anotar hasta pasado el minuto 4. El choque pareció igualarse un poco al alcanzarse el ecuador de este primer acto, aunque rápidamente los de Alejandro Alcoba volverían a poner tierra de por medio en el luminoso, estableciendo máxima de partido a un minuto de la conclusión de este primer acto, quince puntos (27-12), con dos tiros libres de Caleb Agada. Este periodo concluiría con una canasta del visitante Marcos Portález (27-14).
En el segundo asalto, los vascos salieron más enchufados, firmando un parcial de 2-8 en los primeros dos minutos para rebajar su desventaja hasta los siete puntos (29-22). La reacción de los jugadores del decano no se hizo de esperar, devolviéndole a su rival de anoche un parcial aún más contundente de 12-2, con lo que el electrónico reflejaba un muy claro 41-24, a 3’28”, favorable a los de Alcoba. Al descanso se llegaría con un tranquilizador 48-35.
Tras el paso por los vestuarios, los de Antonio Herrera arrancaban el duelo de forma muy diferente, con una intensidad defensiva que ahogaba a los melillenses, que a partir de ese momento encontraron muchas dificultades para ver el aro. De este modo, los visitantes fueron reduciendo paulatinamente la distancia que le separaba del equipo local en el marcador hasta colocarse a solo un punto (59-58), justo al final del tercer cuarto.
El último periodo echaba a andar de forma inmejorable para el Melilla Baloncesto, ya que Juan Rubio acertaba desde el exterior. Este esperanzador comienzo resultó un espejismo, dado que el Sáenz Horeca Araberri contestaba con un parcial de 0-7 que le servía para colocarse, por primera vez en el encuentro, por delante en el electrónico (62-65).
A continuación se produjo un intercambio de canastas del que salió más beneficado el conjunto vasco que disfrutó de una renta de cuatro puntos (66-70). Los melillenses replicaron con un 6-0 (72-70), a 3’30”, y mantuvieron ligeras ventajas hasta que ya dentro del último minuto los visitantes volvieron a tomar la iniciativa en el luminoso para no perderla más (76-78). Juan Rubio solo acertó con un tiro libre, desaprovechandola oportunidad de empatar. Kamba convirtió un triple y acabó con las ilusiones de los azulones, que ya no anotaron más.
El choque finalizaba con un lanzamiento fallado por Josep Franch, que en el rebote cometía falta haciendo que Dedovic se dirigiera a la línea de personal, anotando uno de los dos lanzamientos de que dispuso, con lo que el encuentro finalizó con el resultado de 77-82.

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