Le caen 2,5 años por vengarse a puñaladas del joven que agredió a su hermano menor

Pasadas las 5 de la tarde del 17 de mayo del pasado año, un joven melillense se personó en la playa de Horcas Coloradas en compañía de otras tres personas no identificadas. El joven andaba buscando a la persona que, supuestamente, había agredido a su hermano menor, y cuando consiguió dar con la víctima -que se estaba dando un baño- se aproximó por detrás y le asestó una puñalada en la pierna. A raíz de la herida, la víctima tuvo que someterse a una intervención quirúrgica y le han quedado secuelas. El Ministerio Fiscal pedía inicialmente 4 años de prisión, aunque el reconocimiento de los hechos por parte del acusado dejó la pena finalmente en 2,5 años de prisión, 5 de alejamiento y 28.000 euros de indemnización. Sobre las 5 de la tarde del miércoles 17 de mayo de 2017 un joven de 22 años -el acusado- se dirigió a la zona de la Playa de Horcas Coloradas, acompañado por otras tres personas no identificadas.
Los cuatro individuos estaban buscando a la víctima, otro joven, quien supuestamente había tenido un problema con el hermano pequeño del acusado (menor de edad), con el objetivo de vengarse por la afrenta cometida contra el citado menor. Cuando los cuatro llegaron a la playa, encontraron a la víctima allí; acababa de salir del agua, puesto que estaba tomando un baño.
El acusado se aproximó a la víctima mientras ésta estaba de espaldas y, sorpresivamente, le acuchilló en la parte trasera de la pierna con un arma blanda de grandes dimensiones (un machete de tipo cortacañas). El joven cayó al suelo herido y el acusado se dirigió a él a voz en grito, preguntándole por el porqué de la agresión a su hermano menor.
Acto seguido, el joven acusado salió huyendo del lugar.
La víctima sufrió una profunda herida en el gemelo de la pierna izquierda, de un total de 15 centímetros de longitud, aunque tuvo “suerte”, dado que el ataque no afectó a ningún nervio.
Como consecuencia de sus heridas, la víctima pasó hospitalizada un total de dos días y hubo de someterse a una intervención quirúrgica. La herida tardó 4 meses en sanar completamente, y el perjudicado ha quedado afectado por una leve cojera.
El Ministerio Fiscal interesaba inicialmente para el acusado la imposición de una pena de 4 años de prisión, además de 5 años de prohibición de comunicación y aproximación a menos de 200 metros; sin embargo, el reconocimiento de los hechos por parte del acusado suscitó que ambas partes llegaran a un acuerdo de conformidad según el cual, mediante la asunción de su responsabilidad con respecto a los hechos delictivos que se le imputaban, el Ministerio Público aceptaba una reducción de pena hasta “solo” 2 años y medio de prisión, con mantenimiento del alejamiento.
Además, el acusado deberá abonar una indemnización por valor de 28.000 euros a la víctima, por las secuelas que le han quedado en la pierna a raíz del ataque.

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