El director de la Fundación Española para la Seguridad Vial (Fesvial), Javier Llamazares, indicó ayer la necesidad de tanto las grandes empresas, como las pymes y las administraciones, cuenten con un plan de seguridad vial en el entorno al objeto de reducir la siniestralidad laboral. Señala que no es necesario realizar una gran inversión. Llamazares, que señaló que a la hora de coger el volante debe primar "el sentido común y la lógica", fue uno de los ponentes de las jornadas técnicas de prevención de riesgos laborales que ha organizado la Viceconsejería de Presidencia. Javier Llamazares incluyó en su ponencia en las jornadas de ayer, cuestiones como la seguridad vial, los accidentes de tráfico y sus consecuencias humanas y económicas, así como la normativa en cuanto a la seguridad vial laboral. Pero hizo especial hincapié en explicar porqué es preciso que empresas de todos los tamaños y la administración, elaboren su propio plan de seguridad vial en el entorno, "un plan con sus fases y acciones para llevarlo a cabo". Presentó como ejemplos los planes de grandes compañías como Endesa pero también de varias pymes, porque "un plan no necesita de grandes inversiones".
Indicó que en relación al resto de Europa, España "es el quinto país con mejores cifras en cuanto al número de accidentes de tráfico", aunque reconoció que en los dos últimos años "se están incrementando" los accidentes, motivado por el aumento de la actividad laboral tras la crisis. "Frente al 50% de víctimas mortales de Europa, estamos en torno al 35%" en accidentes que se producen tanto en itinere como en misión.
En cuanto a la prevención, dijo que las reglas a aplicar son las del "sentido común y la lógica", como es el no utilizar el móvil mientras se conduce y no coger el volante bajo los efectos de las drogas y el alcohol.
Formación, la herramienta contra los accidentes
Por su parte, el viceconsejero de Presidencia, Juan José Torreblanca, indicó que cada año el gabinete de prevención de riesgos laborales, dependiente de la Consejería de Presidencia, organiza jornadas formativas dirigidas a funcionarios, empresarios y ciudadanos en general, porque entiende que "es una cuestión importante trabajar por la seguridad laboral", en especial para reducir las consecuencias negativas, tanto de pérdidas humanas como económicas, que provocan los accidentes.
Este año se han organizado dos acciones. La primera, un ciclo formativo sobre conducción en circunstancias adversas que "ha sido un éxito", puesto que han participado 180 alumnos, entre policías locales, bomberos, conductores del parque móvil e incluso personal militar. La segunda acción fue la jornada sobre seguridad vial laboral de ayer, que contó con más de 274 participantes y ponentes de destacada relevancia.
Torreblanca señaló que estas acciones buscan reducir las cifras de accidentes laborales, incluyendo los relacionados con el tráfico, pero reconoció que en Melilla "las cifras de accidentes no son muy altas por las circunstancias físicas de la ciudad". Eso no quita que sea necesario "concienciar a todos" sobre la necesidad de adoptar medidas de prevención.
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