La carestía de medicamentos en las farmacias es un problema que se agranda conforme pasa el tiempo. Según el último informe semestral publicado por la Agencia Española de Medicamentos y de Productos Sanitarios (AEMPS), el desabastecimiento de fármacos en nuestro país ha aumentado en un 38%.
En Melilla, este déficit de medicamentos que sacude al país no ha pasado desapercibido, puesto que, según han indicado al MELILLA HOY fuentes de la red digital de farmacias de LUDA Partners, existen problemas de suministro en medicamentos como la amoxicilina en suspensión y la amoxicilina con clavulánico, que son unos antibióticos para tratar la bronquiolitis; el Ozempic, para tratar la diabetes; el Kreon, útil para problemas relacionados con el páncreas; y el Trankimazin, para tratar la depresión y síntomas de ansiedad, entre otras muchas presentaciones. Todos estos medicamentos también escasean a nivel nacional.
Con el fin de paliar esta situación, dicha red digital, a la que se encuentran adheridas un 20% de las farmacias de Melilla, ha diseñado un software digital a través del cual las farmacias de la ciudad pueden consultar cuál es la botica más cercana que tiene el medicamento que necesita su paciente, permitiendo que este pueda desplazarse a adquirirlo.
“La herramienta se instala en los ordenadores de las farmacias que desean formar parte del proyecto de LUDA”, afirman desde la compañía, que explican que con la herramienta el farmacéutico consigue localizar, en tiempo real, el medicamento que necesita de inmediato su paciente y del que no dispone en su botica, por lo cual, le está asegurando la “adherencia a su tratamiento”.
“El farmacéutico tiene dos opciones para realizar la búsqueda del medicamento que necesita su paciente en la herramienta de LUDA: por el nombre comercial del medicamento o por su código nacional”, comentan. “Por lo tanto, en apenas unos segundos, le aparece en pantalla al farmacéutico la farmacia más cercana de la red de LUDA, ya que tiene que ser dentro de ella, que dispone de ese medicamento. De tal manera que puede hacer una petición a la segunda botica y decirle digitalmente que «tengo un paciente que necesita, por ejemplo, Ozempic».
Para finalizar, el paciente recibe un ticket con la farmacia referida y la indicación de que «en la farmacia tal, que está a determinados metros, tienen disponible el medicamento que buscas. Es así de sencillo”, explican pormenorizadamente.
Una herramienta «colaborativa y solidaria»
Aclaran que este software es una herramienta “colaborativa y solidaria” entre farmacias, pero no un chat, sino una solución basada íntegramente en tecnología.
“Los farmacéuticos sí que tienen sus propios grupos de mensajería instantánea, en los que preguntan a sus compañeros sobre los medicamentos que tienen, pero la efectividad de estas alternativas depende de que te contesten, de que estén pendientes, etc. Los farmacéuticos están gran parte de su jornada ocupados atendiendo desde el mostrador y no siempre pueden responder por esta vía”, aseveran.
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