En los cementerios cristiano, judío y musulmán
Como suele ser habitual cada año por el Día de los Fieles Difuntos, la Ciudad Autónoma, junto con miembros de la oposición y de la Comandancia General de Melilla, han llevado a cabo en la mañana de este miércoles 2 de noviembre la tradicional ofrenda floral a aquellas personas de especial recuerdo para la ciudad de Melilla en los cementerios cristiano, judío y musulmán.
«Hay personas a las que les debemos ese respeto y no podemos olvidar este tipo de cuestiones porque olvidar nuestra historia no es bueno», ha afirmado el presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, quien sostiene con firmeza que «todas las personas se merecen un homenaje y recuerdo sentido» por el Gobierno local. «Es justo y forma parte de nuestra tradición, y las tradiciones hay que conservarlas porque es al final lo que nos queda», ha añadido.
También ha considerado importante «hacerle un guiño» a las comunidades judía y musulmana visitando los respectivos cementerios. «Independientemente de la religión que profesen, son melillenses y españoles y hay que rendirles su justo homenaje», defiende.
En total, se colocaron unas 20 coronas de flores a las víctimas de la pandemia del covid-19, a las de la explosión del polvorín de Cabrerizas (1928), a los aviadores ingleses fallecidos en 1944, a Rafael Ginel, alcalde de la Ciudad entre 1979 y 1983; al presidente de la Junta de Arbitrios entre 1928 y 1931, Cándido Lobera; a los restos del cementerio antiguo, al exdiputado nacional Julio Basset, a Dolores Carmona, al ‘Soldado de los Milagros‘, al guardia civil asesinado por ETA en 2022, Antonio Molina Martín, a las víctimas del accidente aéreo de 1998 y del depósito de agua de Cabrerizas (1997) o a los caídos por España en el Panteón de los Héroes.
