La Ciudad destaca su “gran apuesta” por el cementerio musulmán invirtiendo 1,3 millones en esta legislatura

El Gobierno de Melilla puso ayer en valor el esfuerzo realizado en esta legislatura, con una inversión de 1,3 millones de euros, para la mejora del cementerio musulmán con varias obras, una de las cuales está a punto de finalizar y la otra, para ampliar sus instalaciones, empezó ayer mismo. Se trata, según el presidente melillense, Juan José Imbroda, de “una gran apuesta”. Imbroda visitó ayer el cementerio musulmán para comprobar el resultado de las obras que se están acometiendo, con un presupuesto de 109.450 euros, para reparar algunos de sus elementos, como las fuentes para abluciones, las jardineras de su entrada, y los pilares del atrio, que estaban apuntados desde el terremoto de 2016.
Esta actuación también ha supuesto la demolición de alicatados y carpintería, así como el adecentamiento y modernización de los aseos y la sala de rezos de mujeres, una obra a la que le queda apenas una semana para su finalización, según explicó el propio Imbroda en declaraciones a los periodistas.
Asimismo, colocó la primera piedra de una nueva obra para la ordenación y reforma del cementerio, que supone una inversión de 488.974 euros para la construcción de un nuevo edificio administrativo de dos plantas, la creación de una zona de aparcamientos para 43 vehículos y nuevas zonas verdes.
Estas obras se suman a la que la Ciudad Autónoma ya hizo al inicio de la legislatura para crear un millar de tumbas nuevas, si bien Imbroda admitió que será necesario seguir interviniendo en ese sentido porque la capacidad de enterramientos que hay en la actualidad es para unos 12 años y hace falta hacer más tumbas “porque así lo demanda la sociedad melillense”.
Todo ello eleva la inversión realizada en esta legislatura a 1,3 millones, lo que a juicio de Imbroda evidencia que se ha realizado “una gran apuesta” por esta instalación.
En su recorrido por el cementerio musulmán, Imbroda visitó la sala de rezos acompañado por el consejero de Coordinación y Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, y otros responsables de la instalación, para lo que cumplió con el rito de descalzarse.

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