La Asociación Vecinos Assalam y el Barrio Nuevo de La Cañada piden que se anule el cierre de la mezquita todos los viernes

La Asociación de Vecinos Assalam y el Barrio Nuevo de La Cañada de Hidum solicitan a la Ciudad Autónoma de Melilla que se anule el cierre de la mezquita todos los viernes, pues aseguran que dicha orden “ningunea toda normativa superior”. Además, consideran que está fuera de toda duda que la pandemia mundial del Covid-19 “constituye un presupuesto de hecho evidente para acudir a uno de los tres estados excepcionales” contemplados en el artículo 116 CE.

Los representantes vecinales explican que la Ley Orgánica 4/1981, que regula los estados de alarma, de excepción y de sitio, “no permite suspender el derecho a la libertad religiosa y de culto durante el estado de alarma ni tan siquiera durante el estado de excepción o el de sitio”.
También aseguran que dicha ley se remite al artículo 55 de la Constitución, que concreta los derechos que pueden ser suspendidos durante los estados de excepción y de sitio, “no hace referencia a los derechos amparados por el artículo 16 de la Carta Magna, que protege la libertad religiosa y de culto”.
“El Gobierno, mediante el Real Decreto 926/2020, de 25 de octubre, ha optado por declarar el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria”, añaden.
En este caso, informan que a diferencia de los estados de excepción y de sitio, solo “pueden establecerse limitaciones” al ejercicio de los derechos, pero “no pueden suspenderse éstos”.
En relación al derecho fundamental de libertad religiosa, “en lo que aquí interesa”, el Estado “no puede hacer nada que entorpezca las manifestaciones de las creencias, el ejercicio público del culto y la posibilidad para los fieles de reunirse para celebrar su culto”, si bien “está sujeta a las limitaciones que establezca la ley para preservar la seguridad, el orden, la salud o la moralidad pública o los derechos y libertades fundamentales de los demás”.
De igual modo, la Asociación de Vecinos Assalam y el Barrio Nuevo de La Cañada de Hidum subrayan que el Decreto 926/2020, de declaración de estado de alarma, “no suspende el culto ni las ceremonias religiosas, ni obliga a cerrar los lugares de culto, ni prohíbe la asistencia a los lugares de culto”, pero sí se limita la permanencia de personas en lugares de culto mediante la fijación, “por parte de la autoridad competente delegada correspondiente, de aforos para las reuniones, celebraciones y encuentros religiosos, atendiendo al riesgo de transmisión que pudiera resultar de los encuentros colectivos”.
Por otro lado, recuerdan que el Consejo de Gobierno de la Ciudad Autónoma, atendiendo a las indicaciones del Decreto 926/2020, aprueba en el BOME el decreto 110 de fecha 26 de enero, en el que marca 1/4, es decir 25 % del aforo máximo en los lugares de culto. “Curiosamente, en el mismo BOME, la Consejería de Economía y Políticas Sociales hace caso omiso a las indicaciones decretadas por el Estado y el decreto del Consejo de Gobierno de la Ciudad, publicando una orden en la que obliga el cierre de los templos religiosos en días determinados, cargándose de esta manera la libertad religiosa de las tres religiones de la Ciudad”.

“La orden de cerrar los templos es anticonstitucional”
“Según informó el señor consejero de Economía y Políticas Sociales, la decisión de cerrar los templos fue a raíz de la queja del presidente de la Comunidad Islámica de Melilla, que le confesó que no pueden mantener el aforo, pero por otra parte, Mohamed Mohamed Mohand reconoció que los únicos que se han quejado de la orden del cierre de los templos religiosos han sido los católicos”, expusieron ambos colectivos vecinales.
También le recuerdan al consejero de Economía y Políticas Sociales que los viernes se reza cinco veces al día, como todos los días de la semana, “pero si su intención era prohibir el rezo del medio día del viernes, por ser el más multitudinario, también le recordamos que con las normativas de aforo de meses anteriores, lo suprimimos voluntariamente, ya que el aforo no permitía realizar esa oración, al igual que el aforo actual, que tampoco permite dicha oración”, por lo que la orden de cerrar templos “es anticonstitucional y está de más”.
Para concluir, creen que Mohamed Mohand está realizando una quiniela “sobre quién se queja o deja de quejarse por el cierre de los templos religiosos”, aunque la mejor que se va a realizar “es en las urnas, aunque su actitud y forma de gestionar la situación no le favorece”.
Así, desde la Asociación Assalam y Barrio Nuevo de La Cañada de Hidum “solicitamos la intervención del presidente de la Ciudad para anular dicha orden que ningunea toda normativa superior”.

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