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IU-Melilla pide la derogación del llamado “Impuesto al Sol”

Izquierda Unida-Melilla ha pedido que la Ley del 10 de Octubre de 2015 (RD 900/2015), conocida como "Impuesto al Sol", sea derogada. Así, a través de una nota, indica que en Melilla, como isla energética, “debemos de mirar hacia las instalaciones de pequeñas plantas de energía renovable que podrían estar situadas bien en los terrenos públicos del perímetro de la ciudad o en las cubiertas de los edificios públicos”. La formación que dirige Rosendo Quero señala que la conexión con un cable eléctrico submarino con la península “es urgente y necesaria para evitar el enlace con Marruecos y dejar de ser isla energética y estar directamente enlazada con la península”. Asimismo, ha manifestado que hace unas semanas el Gobierno aprobó el conocido como "impuesto al sol" del ministro Soria, un controvertido real decreto que grava el autoconsumo eléctrico.

Para IU-Melilla, España tiene una posición privilegiada para la utilización de la energía solar. “Pero las grandes compañías eléctricas quieren seguir haciendo caja, y han conseguido que los sucesivos gobiernos pongan enormes obstáculos para impedir el aprovechamiento de las energías renovables”.

El último, este "peaje para sufragar el coste del sistema eléctrico".

Por ello ha asegurado que “hay muchos españoles que apostaron por la energía solar. Gente que invirtió sus ahorros en plantas fotovoltaicas, y que han sufrido un importante mazazo cuando el Gobierno decidió retirar de golpe todas las ayudas que supuestamente estaban destinadas a fomentar las energías renovables. Gente que decidió instalar placas en su casa para producir y utilizar su propia energía, más limpia”.

Ahora el Gobierno, a menos de un mes de las elecciones, acaba de aprobar este nuevo impuesto con el que pretenden cobrar a aquellas personas y empresas que generen su propia electricidad.
“Es intolerable que el Gobierno quiera hacer pagar más a las personas o empresas que producen su propia energía” dice IU- Melilla, para añadir que “todo esto se debe a la enorme presión de las grandes empresas eléctricas”.