Este nuevo auto de la Audiencia Provincial supone un auténtico revés para el extitular del Juzgado de Instrucción número 2 de Melilla, Emilio Lamo de Espinosa, a quien se le reprocha el criterio empleado en cuanto a las formas con las que llevó a cabo este procedimiento. No en vano, la Audiencia señala “la existencia de una sucesión de irregularidades” por el criterio del magistrado en la forma empleada para ordenar la práctica de diligencias “cuando en puridad, no podía considerarse admitida la querella”.
La Audiencia se refiere a “la existencia de una sucesión de irregularidades que deberían haber tenido adecuada respuesta por parte del órgano jurisdiccional” en relación con las personaciones de las partes acusadoras y el modo en que se han admitido las pruebas a esta causa.
Así, la Audiencia reprocha a Lamo de Espinosa que abriera diligencias sin las firmas y ratificaciones de los apoderados o representantes de asociaciones como Andalucía Acoge o SOS Racismo. En el caso de Prodein, ni siquiera aportó poder y, sin embargo, se le admitió la querella y pruebas que presentó. Lo mismo ocurrió con la Coordinadora de Barrios y APDH-A.
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“Irregularidades” de Lamo de Espinosa