Imbroda califica como “una canallada” la acusación de Aberchán tras muerte del menor

El presidente de Melilla, Juan José Imbroda, calificó ayer como una “canallada” las declaraciones del presidente de Coalición por Melilla (CPM) y líder de la oposición, Mustafa Aberchán, tras la muerte de un menor del Centro de Reforma, dependiente de la Ciudad Autónoma, el pasado viernes. Aberchán dijo el miércoles que el suceso ocurrido con este menor pone de manifiesto que la vida de los menores acogidos por la Ciudad Autónoma “no está garantizada”, unas declaraciones que Imbroda interpretó como un ataque a los profesionales que desempeñan su trabajo en los centros de menores de Melilla.
En opinión de Imbroda, una persona que aspira a tener responsabilidades públicas en la Ciudad Autónoma “no se lo merece si dice eso”, ya que con sus palabras “cuestiona la profesionalidad de muchos trabajadores” del centro de reforma y los centros de acogida, así como a las empresas adjudicatarias de su gestión.
Imbroda desmintió a Aberchán al asegurar que los “cientos” de menores acogidos por la Ciudad Autónoma en sus centros “tienen todas las atenciones y cuidados del mundo”, para lo que realiza un esfuerzo económico de unos 12 o 13 millones de euros anuales, y “nunca ha pasado nada”. Aclaró, además, que el menor fallecido sufrió un infarto, “como podía haberlo tenido con 16 o 58 años”, después de participar en una pelea con otro interno del Centro de Reforma “que inmediatamente fue disuelta por los cuidadores”.
Por todo ello, pidió al líder de la oposición que deje de hacer “demagogia barata con los menores”.
Además, dijo no haber tenido contacto con la Fundación Diagrama, adjudicataria de la gestión del centro, pero vio lógico que vaya a emprender sus propias acciones porque “le tiene que haber dolido la injusticia y la gravedad de las acusaciones”.

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