- ¿Qué es para ti un presidente?
- El presidente de un país, no es solo un ser humano. Come y defeca como un ser humano, pero es algo más que toda esa decrepitud que nos iguala y que hasta cierto punto nos avisa, de que todo tiene una perdida y una valoración.
Un presidente es la representación de la fuerza, la protección, la honestidad, la sinceridad, la equidad, el valor, la defensa, la hermandad, el ejemplo y la paternidad, de millones de seres humanos que confían en él, en su verdad, en su conocimiento y legalidad, para ser mejores y mejorar el hábitat que les concierne y les unifica.
Un presidente, no es ni bueno ni malo. Un presidente, está por encima de esas dos definiciones que le reducen o le amplían innecesariamente, porque su trabajo no está para ser valorado sino para ser compartido. No es labor para deslumbres personales. Es esfuerzo común reconocido.
Un presidente, es un agricultor que según laborea y semillea la tierra, así esta le dará su fruto. Un presidente no manda, Un Presidente gobierna. Porque sabe, que el gobernante, es el auténtico responsable de los Derechos Humanos de la gente….
¿De qué le vale a un padre de familia sus derechos Humanos, si pagan su trabajo con salarios de miseria…mientras los que dicen mandar, despilfarran el dinero en retribuciones, comidas, viajes, etc.…? ¿De que valen a un muchacho sus Derechos Humanos, si tiene que marcharse de su casa y su país por falta de trabajo, mientras que aquellos que alardean de igualdad y fraternidad, acaparan insaciables, todo aquello que organizan para sus propios beneficios? ¿De que valen las urnas, si después los chanchullos y apaños en las sombras las rompen?
No. Los Derechos Humanos, no debe ser una frase más que sirva junto a otras, para engrandecer solo una Constitución, cuando esta se ha diseñado pensando en un “pueblo-rebaño” y no en una Comunidad de hombres y mujeres igualados en la conquista de los mismos derechos y deberes divinos y sociales.
Por lo tanto, es un presidente, el único responsable de que estos Derechos, dejen las páginas de un libro constitucional, y se constituyan en la mente y en el corazón de lo humano, ya que la misión de un presidente, no está solo en abrir escuelas y talleres y cerrar cárceles y centros de caridad, sino lo más importante, alcanzar con su trabajo, el cariño, el respeto y el bienestar, de todos sus gobernados.
- ¡Eso es muy difícil ¡
- ¡Claro que lo es ¡Es que ser presidente, es muy difícil! Porque un presidente no nace de los partos con cesárea de embarazos ilegales. De abortos y nacimientos contrahechos y acomodaticios. Ni tan siquiera un presidente sale de las urnas. De las urnas, como su nombre indica, y queda demostrado, salen los fantasmas. Y esos son los que tienen montado el aquelarre llamado “democracia” que viene de demacrado.
- Entonces: ¿hay presidente, o no?
- Solo veo a un hombre acorralado por un partido y unos deberes impuestos, ajenos a sus ideas, y eso puede traer para todos, lamentables consecuencias.
Buenos días y buen futuro
