melillahoy.cibeles.net fotos 1543 SGG5511
Ayer lunes dio comienzo la primera fase del Programa de Reinserción Socio Educativo Laboral (PISEL) que acoge el Centro de Día de Drogodependientes dependiente de la Consejería de Presidencia. Setenta personas en proceso de rehabilitación, entre ellos seis menores no acompañados, participan en los seis cursos que se desarrollarán hasta el mes de junio. La oferta incluye talleres de jardinería, costura, alfabetización, peluquería, reciclado o mantenimiento integral de edificios, entre otros.
Los alumnos son personas con adicciones en proceso de rehabilitación que están incluidos en alguno de los programas que se realizan en Proyecto-Hombre Melilla o en el Centro de Atención al Drogodependiente de Cruz Roja en Melilla. Desde el año pasado también se forman algunos usuarios mayores de 16 años, procedentes del Centro de Menores No Acompañados, en los que se han detectado consumos de riesgo y adicciones.
Cada taller tiene un número de plazas aproximado de 10 personas (8-12), y están enfocados al desarrollo de determinadas habilidades y a la adquisición de conocimientos propios de las materias impartidas, que les sean de utilidad en este proceso de rehabilitación y les proporcionen recursos de cara a su futuro laboral. En estos talleres de forma simultánea, aprenderán pautas, normas y valores que se desarrollan en el contexto de un ambiente de convivencia y de aprendizaje.
Este programa en Melilla se está realizando desde 2001, aunquel desde 2010, en el que se habilitó el nuevo Centro de Día, dotado de 5 salas de trabajo, se ha incrementado el número y la oferta de los talleres. La continuidad en el tiempo a lo largo de estos años, y las evaluaciones realizadas, han permitido ir mejorando y adaptando la finalidad y organización de los talleres a las necesidades y preferencias de los usuarios. Este año se pretende aprovechar el trabajo que se realiza en estos talleres (jardinería, carpintería, artesanía, costura…) para mejorar las instalaciones y jardines de la ciudad, y para contribuir en la ornamentación navideña de algunos espacios públicos, y de esta forma, dar también visibilidad al trabajo realizado por estos usuarios.
En esta primera fase del PISEL, se van a realizar seis talleres: Costura; Alfabetización y Orientación Laboral; Mantenimiento Integral de Edificios; Peluquería y estética; Artesanía y Reciclado; y Jardinería. Este último que se realiza en las instalaciones de la Granja Agrícola, comenzó en marzo, y cuenta con un número de 17 alumnos.
La realización de estos talleres están enmarcados en el II Plan sobre Drogas y Adicciones de la Ciudad de Melilla 2014-2017. Esta primera fase del PISEL, cuenta con un presupuesto total de unos 54.000 euros: 10.000 parea recursos materiales; 28.000 euros para las becas de formación de los alumnos (que recibirán 150 euros al mes siempre que no falten a clase); y 15.713 euros para la contratación de los monitores, que se ha realizado a través de un concurso en el que ha salido agraciada la empresa Clece.
La consejera de Presidenta y Salud Pública, Paz Velázquez, acompaña por las responsables del Centro de Día de Drogodependientes, inauguró los talleres y aplaudió el desarrollo de este tipo de acciones que buscan contribuir a la reinserción de personas que se han enfrentado a problemas graves de dependencia. La inauguración de los talleres fue también una magnífica ocasión para dar por inaugurada la rehabilitación llevada a cabo en las instalaciones del antiguo balneario número uno en el que se ha instalado el centro de día.
Hombres, la mayoría de los usuarios
Por su parte la doctora Luisa Hermoso, señaló que en el centro de día, el perfil de los usuarios que atienden es diferente al del resto del país en el sentido de que la práctica totalidad son varones con "edades medias y usuarios de programas de metadona, que llevan muchos años de adicción a heroína no inyectada, sino fumada junto a hachís; pero también tenemos usuarios con otros consumos, como alcohol y cocaína". Por lo general, la evolución de los usuarios suele ser "buena", ya que el 90% de ellos suele terminar este tipo de cursos de formación. El resto abandona bien porque ha sido llamado a los planes de empleo, porque debe cumplir con la justicia o por recaídas. Indicó que el proceso de rehabilitación, dependiendo de la sustancia y del programa a aplicar, suele durar entre nueve meses y año y medio. Explicó que el proceso de desintoxicación suele ser el más corto, pero el de deshabituación es el más largo.
El Papa Francisco, fallecido el 21 de abril, será trasladado el miércoles a la Basílica…
Margarita Robles, ministra de Defensa, ha reivindicado este lunes el papel fundamental que realizan los…
El Club Olímpic Center de Melilla se destacó en la velada ‘Guerreros’ en Murcia, logrando…
El Club Voleibol Melilla se prepara para la fase de ascenso a la Liga Iberdrola,…
La U.D. Melilla ha reiniciado esta semana los entrenamientos tras su victoria ante el C.D.…