Escobar lamenta que el Ejecutivo “se escude en el silencio o el insulto”

El secretario general del Partido Socialista de Melilla (PSME-PSOE), Gregorio Escobar, criticó ayer que, durante el Pleno de Control celebrado el pasado viernes, el Gobierno de la Ciudad se "escudara en el silencio o en el insulto". En rueda de prensa, Escobar resaltó que las sesiones plenarias sirven para que la oposición pregunte al Ejecutivo sobre su gestión y sus decisiones, de ahí que, "en teoría", requieran de la transparencia del Gobierno a la hora de responder. Sin embargo, de las cinco preguntas que los socialistas llevaron a Pleno, sólo una fue respondida en Pleno. Las cuatro restantes serán contestadas por escrito.

El que sí respondió a la pregunta fue el presidente Juan José Imbroda. "De inicio no contesta, se reserva el último turno de palabra, cuando ya no se le puede replicar, para lanzar insinuaciones o acusaciones", subrayó el líder socialista, que además dijo que la "leal escudera" de Imbroda, la vicepresidenta primera de la Asamblea, Cristina Rivas, no ve alusiones personales y deniega los tres minutos que le corresponden al diputado para contestar.

Para Escobar, lo ocurrido en el Pleno de Control del viernes demuestra que el Gobierno de la Ciudad está "atrincherado y perdido en sus propias mentiras" y que realiza una "estrategia para desviar la atención de los problemas" que tiene. En concreto, se refirió a la contratación pública de Melilla, "motor fundamental de la actividad económica" en la ciudad y que "garantiza la supervivencia" de pequeñas y medianas empresas (PYME) y miles de puestos de trabajo.

En este sentido, el socialista avanzó que el PSOE va a presentar una moción para promover y facilitar la participación en los contratos de todas las empresas que lo deseen, habida cuenta de que la contratación publica debe basarse en la libertad de licitaciones, la publicidad y transparencia, el gasto eficiente y debe promover la oferta más ventajosa".

De ahí que los socialistas, apuntara Escobar, apuesten por promover y facilitar la participación de las PYME, máxime cuando el Gobierno de la Ciudad ha reconocido que, de las más de 3.000 empresas que hay en Melilla, sólo un centenar son adjudicatarias de contratos del Gobierno local, lo que no supone ni el tres por ciento del total.

Entre las medidas que propone está la creación de una Comisión de Valoración y Control que permita el seguimiento y control de cualquier contrato que se haya realizado, o el anuncio previo de contratos para el próximo periodo de tiempo, como puede ser un trimestre o semestre, que permitiría a muchas empresas preparar ofertas.

De igual modo, dijo el responsable socialista, está la posibilidad de pedir al menos tres ofertas para los contratos menores y que todos ellos, salvaguardando las cuestiones que señala la ley de protección de datos, ser hagan públicos. O el llegar a acuerdos con colegios profesionales y asociaciones de empresarios para hacer un registro de las empresas que quieran trabajar con la administración, para poder hacer sistemas de rotación y que se tenga constancia de que se llama a distintos empresarios y profesionales.

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