Categorías: Opinión

Entrega

Decía Salvador Saavedra en su Pregón que “no es la Semana Santa solo ocasión de emociones fugaces, sino de formular convicciones firmes y verdaderas que cambien nuestra vida terrena hacia la vida del Cielo”. Son días de entrega desde Jerusalen pasando por la soledad del Huerto para terminar en un abrazo de misericordia colgado en un madero. Muerte y vida, camino, pasión, amistad y hermandad. Y al lado, la Madre que es Esperanza, Lágrimas, Piedad, Soledad pero que siempre será Victoria. La que nos trajo El con el Rocío de amanecida aunque pocos creyeron en que no hay lugar entre los muertos para aquel que Vive. ¡Que distinto sería nuestro paso fugaz por el mundo si todo terminase en la tierra!. ¿Para que esforzarnos en ser mejores, para que dar sin recibir, para que perdonar?. Sin El nada tiene sentido ni estaríamos aquí. La suerte de nacer nos debe llevar a construir, sumar, a poner concordia donde todo es infamia, odio y división. Pero somos humanos y no entendemos demasiadas cosas, ¿por qué de la enfermedad, del dolor o ausencia?. Entonces hay que mirar al Cristo del Socorro y pedirle lo que una noche hizo en la Parada mientras se elevaba al Cielo y un hachón dio luz a Melilla. Hay que volverse Cirineo en tantas caídas, hay que enjugar un rostro de paro, ruptura, soledad del anciano o hambre. Hay que ser justos y no lavarse las manos como aquel romano. Que ese monte de buganvillas sean manos que paran la necesidad, tiempo para entregarlo a otros, palabras para abrir puertas a quienes las perciben cerradas ante un embarazo, ante el perdón o los fuertes vientos de la vida, ante el inmigrante, el penado privado de libertad, el ser que termina su existencia en una residencia o las victimas del terrorismo, del no nacido o de la violencia de genero sea hombre o mujer, anciano o niño. Que ante aquel que trajo Paz reconozcamos el daño que a otros hemos hecho y con sinceridad, cambiemos. Humillado por pecados, por ofensas, u olvidos. Cautivo de nuestros egoísmos y Flagelado cuando no somos como aquel de Samaría. El camino de Jericó se nos presenta cada jornada a la vuelta de una esquina ¿y qué hacemos?, demasiadas veces giramos la cabeza, no es nuestro tema, le ha pasado a otro o condenamos. Y el Domingo de Resurrección no existiría sin aquellas palabras que aun dichas por el buen ladrón son las que ansiamos pronunciar nosotros: “Señor acuérdate de mi cuando llegues a tu o”. Y Jesús nos lo dirá “Te lo aseguro, hoy estarás conmigo en el Paraíso”.

Acceda a la versión completa del contenido

Entrega

Entradas recientes

España y Marruecos ultiman la apertura de las aduanas comerciales de Ceuta y Melilla

España y Marruecos avanzan en la apertura de aduanas comerciales en Ceuta y Melilla tras…

3 minutos hace

Imbroda rechaza reabrir una aduana “con las condiciones de Marruecos” porque Melilla “sería considerada una ciudad marroquí más”

El presidente de Melilla, Juan José Imbroda, se opone a abrir la aduana comercial con…

17 minutos hace

Delegación asegura que están trabajando para reabrir la aduana “a la mayor celeridad posible”

Sabrina Moh, delegada del Gobierno en Melilla, afirmó que se trabaja con Marruecos para reabrir…

33 minutos hace

La plantilla de la Unión Deportiva Melilla regresa a los entrenamientos

Después del parón navideño, los jugadores dirigidos por David Cabello volvían este jueves a ponerse…

39 minutos hace

Consulte la portada del MELILLA HOY del viernes 3 de enero de 2025

Ahora puede comprar la "Versión Digital" del Diario en formato PDF desde cualquier parte del…

8 horas hace

Eric Iglesias fortalece el ataque azulino

El delantero sub-23 se une inmediatamente a las filas unionistas para lo que resta de…

10 horas hace