Las jugadoras de Andrés Castillo, antes de que la competición quedase paralizada debido a la pandemia del coronavirus COVID-19, habían ganado 16 de los 22 encuentros disputados, empatando otros tres y perdido solo tres. Además, son las menos goleadas con 29 tantos encajados. El Torreblanca Melilla ocupa una meritoria segunda posición dentro del Grupo 3º de la 2ª División Femenina de Fútbol Sala, a solo cuatro puntos del líder, el Futsal Alcantarilla, conjunto que estaba en disposición de dar el salto de categoría de forma directa a la 1ª División.
En lo que se refiere a las futbolistas dirigidas por Andrés Castillo, disponían de una ventaja de tres puntos sobre su más inmediato perseguidor, la U.D. La Cruz Villanovense, teniendo el segundo puesto como premio la clasificación para el play off de ascenso.
Hasta el momento del parón a causa del coronavirus COVID-19, las melillenses solo habían perdido tres partidos, todos ellos a domicilio, en concreto ante el Martos F.S., la U.D. La Cruz Villanovense y el Atlético Torcal. Mientras, en el Pabellón Lázaro Fernández las blanquinegras únicamente dejaron escapar un sorpresivo empate frente al farolillo rojo, el Cádiz Polideportivo.
De aquí al término del campeonato, nuestro representante debía afrontar ocho compromisos ligueros, cinco en casa (Roldán F.S., Guadalcacín F.S., U.D. La Cruz Villanovense, Bayyana C.D. y Futsal Alcantarilla) y tres a domicilio (Córdoba F.S., Monachil 2013 y S.D. Hispania).
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El Torreblanca Melilla estaba firmando una gran campaña