El PP pide abrir un pasillo humanitario para el retorno de melillenses atrapados en Marruecos

El PP de Melilla cree que, aunque el cierre de las fronteras entre España y Marruecos en la ciudad “está bien” para controlar la pandemia, es necesario abrir un pasillo humanitario para que puedan retornar a Melilla un grupo numeroso de españoles que se encuentran atrapados en el país vecino.

El presidente regional del PP y expresidente de Melilla, Juan José Imbroda, ha explicado que su partido ha planteado este asunto en las Cortes Generales mediante gestiones de los parlamentarios nacionales, entre ellas el escrito que la senadora popular por la ciudad, Sofía Acedo, ha presentado dos veces sobre la situación de estos melillenses.
Muchos de ellos se encuentran en la provincia de Nador, a escasos kilómetros de Melilla, de ahí que Imbroda considere “una barbaridad” que las únicas alternativas que se les estén dando sean ir a Rabat o Casablanca para coger un vuelo a Madrid o París, o bien en barco a la localidad francesa de Sète.
Imbroda ha recordado que estas personas, la mayoría de las cuales ha rechazado esas opciones por falta de recursos económicos y garantías de obtener plaza, podrían ver resuelta su situación “en una hora” a través de un pasillo humanitario en la frontera terrestre de Melilla, pero cree que si no se hace “es dejación”.
En este punto, ha criticado que “la relación última con Marruecos es dejarle hacer lo que quiera”, y ha insistido en que si el Gobierno de España “mirara un poco a Melilla, que no está en ese plan”, lo que debería haber hecho es “decir a Marruecos que abra un pasillo humanitario” para poner fin a esta situación.
Todo ello, ha apostillado, llevando a cabo un control sanitario de las personas que retornen en la frontera española, de ahí que haya incidido en que “si no lo hacen es porque no quieren”.

Rojas: “No está en mi mano. Compete a los gobiernos de España y Marruecos”

Por su parte, la vicepresidenta primera de la Ciudad Autónoma, Gloria Rojas, ha dicho que esto no depende de la Consejería de Presidencia y Administración Pública, de la que es responsable, ni tampoco de la Delegación del Gobierno en Melilla, habida cuenta que es un tema que compete al Gobierno de España y al de Marruecos.
En cualquier caso, ha defendido que la Delegación del Gobierno ha intentado que estas personas pudieran regresar a Melilla, pero ha argumentado que “todos conocen las opiniones de Marruecos y sus actuaciones” y ha lamentado que este asunto no esté en su mano.
No en vano, ha admitido que los melillenses atrapados en el país vecino “tendrían que haber vuelto a su país” y “por humanidad”, y porque es lógico que quieran estar en sus casas, se les debería haber permitido.

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