El PP califica de “tomadura de pelo” que el Gobierno local presente un plan contra la pobreza

El diputado local del Partido Popular, Daniel Conesa, afirma que es “una tomadura de pelo” que el Gobierno de Eduardo de Castro anuncie la inclusión de un Plan contra la Pobreza en los Presupuestos de 2020 cuando afirma que lo que se ha hecho ha sido aglutinar bajo este epígrafe acciones y programas que llevan años funcionando en la Ciudad, destinados a la atención de personas en riesgo de exclusión. En la Memoria de los Presupuestos de 2020, el Gobierno local incluye el llamado Plan Integral Contra la Pobreza y Exclusión Social (Plan PIPES), que busca, mediante “la ejecución coordinada de diversas aplicaciones presupuestarias, implementar un ambicioso plan que posibilite una paulatina y duradera reducción del número de ciudadanos y familias que se encuentran por debajo del umbral de pobreza”.

PIPES
El Plan PIPES implicará, afirman, “el trabajo e impulso integral, conjunto y coordinado entre las diferentes consejerías y el resto de entes dependientes de la Ciudad, mediante políticas transversales” que respeten las medidas recogidas en los presupuestos de este año. Así, en Prevención de Inserción Social, se habla de una partida de 3,2 millones que gestionará la Consejería de Economía y Políticas Sociales, que también se encargará de los 50.000 euros de las becas de los talleres de drogodependientes, y de los 16.000 euros en subvenciones para el fomento a la artesanía.

75.000 euros será la partida que gestionará la Consejería de Educación, Cultura, Festejos e Igualdad en gastos de programas de inserción. La de Distritos, Juventud, Participación Ciudadana, Menor y Familia, se encargará del Plan de Ayudas apara la inserción socio-laboral dotado con 300.000 euros, también de los 400.000 euros para el área de distritos; y de los 283.000 euros del área de atención y participación ciudadana.

La Consejería de Hacienda, de los 2,4 millones de los planes de empleo con entidades locales; de los 200.000 euros de las subvenciones en materia de empleo y formación; de los 100.000 euros del convenio para el sostenimiento de los planes de empleo; los 743.000 euros de los talleres de empleo y escuelas taller, y de los 1,3 millones de los planes de formación de Promesa.

Falsedad
Daniel Conesa califica de “tomadura de pelo firmada por Eduardo de Castro en la memoria de presupuestos de 2020” la presentación del Plan PIPES, y asegura que es “un insulto a la inteligencia de los melillenses”. Apostilla que en realidad lo que ha hecho el Gobierno de la Ciudad es “una relación de partidas, la mayoría ya existentes, y las suman” para decir “tenemos un plan”, pero “ni plan, ni nada que se parezca”. Lo que le sorprende, indica, es que el PSOE y Gloria Rojas lo siguen “consintiendo”.
“Es falso que los presupuestos 2020 incluyan algún Plan contra la pobreza”, apostilla Conesa, que asegura que “es simplemente una relación y suma de partidas existentes desde hace tiempo como los planes de empleo, talleres, IMI, etc., que han denominado plan, pero nada nuevo”. Tiene claro que se trata de “una nueva tomadura de pelo de Mustafa Aberchan”.

Políticas ya en marcha
Apostilla el diputado local del PP, que desde hace años la Ciudad Autónoma cuenta con programas de lucha contra la pobreza y la exclusión social, como por ejemplo el salario social o IMI, el Programa de Prestaciones Económicas para situaciones de Emergencia Social, el de Equipamiento básico de vivienda, el de gastos de endeudamiento previo; y los comedores sociales.

Además, indica, se han desarrollado “numerosas” acciones para reducir el riesgo de exclusión social con “políticas de empleabilidad e inserción laboral por medio de
instituciones como PROMESA”, sin olvidar “las subvenciones destinadas a entidades que atienden a colectivos desfavorecidos tan diversos como jóvenes, personas con discapacidad, mujeres en riesgo de exclusión de origen inmigrante, drogodependientes, familias de barrios desfavorecidos y personas sin hogar, adultos sin alfabetizar, transeúntes, menores infractores, niños tutelados, población sordo-ciega, o reclusos y ex reclusos, entre otros”.

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