El PP califica de “inadmisible” que por motivos “religiosos” no se sirviera alcohol en la comida de Navidad

El Partido Popular denuncia “la inadmisible” gestión que el gobierno de Eduardo De Castro “ha hecho de un evento especialmente señalado para los residentes del Centro Asistencial como es la comida de Navidad, en la que se impuso que no se sirviera ni alcohol ni derivados del cerdo”. El PP pide “inmediatas explicaciones al presidente de la ciudad por esta preocupante actitud de deriva cultural/religiosa durante una celebración en una institución pública”. En declaraciones a este Diario, fuentes del PP califican de “ataque indeseado el hecho de que se prohibiera en una comida de Navidad el alcohol y los derivados del cerdo ante la estupefacción de internos y trabajadores que, en toda la historia del centro, jamás habían asistido a tal despropósito”; sin duda “una peligrosa deriva ‘cultural’ que exigimos de inmediato fulminar de nuestra sociedad”.

Comida de Navidad
Como cada año y como viene siendo tradición, “se esperaba la organización, por parte de la Ciudad Autónoma, de un evento especial con motivo de las fiestas navideñas: ágape para los internos y la visita y felicitación del correspondiente responsable político de turno”. Sin embargo, “para la desagradable sorpresa de todos, la comida de Navidad del Centro Asistencial se convirtió en una amalgama de improvisación e indignación para los internos y trabajadores del Centro Asistencial”, afirman.

Estas fuentes del PP señalan que, según han podido saber, el "olvido" por parte de la administración a la hora de contratar el catering para el servicio en cuestión, conllevó “apresuradas gestiones para solventar tan imperdonable dejación de funciones; tantas, que otras tantas empresas se vieron obligadas a preparar imposibles presupuestos”.
“Ante tamaña e impresentable mala gestión con motivo de celebraciones tan señaladas, parece que se ‘soluciona’ el desaguisado y se logra que una ‘empresa de servicio’ sirva la comida especial de Navidad para los internos del Centro Asistencial”.

Sin embargo, “ante el mayúsculo asombro del personal del centro y de muchos internos”, la empresa adjudicataria comienza a "desembarcar" sus enseres “sin las mínimas medidas de salubridad e higiene: pescado en bolsas de plástico, enseres depositados en el suelo de las cocinas, alimentos no refrigerados…"
Los trabajadores del Centro Asistencial, “atónitos, dispusieron comprar bebidas para amenizar la comida para aquellos que, libremente, decidieran tomar alcohol”. “Nos preguntamos hacia qué sociedad nos pretende conducir el gobierno de Castro”, manifiesta.

Todo esto serviría para engrosar “una denuncia argumentada por falta de medidas mínimas de seguridad alimentaria para un colectivo vulnerable”, sino llevara aparejada “una intolerable e inadmisible actitud de intolerancia, precisamente acuñada por quien demostró esos mismos principios durante la campaña electoral que la aupó a miembro del gobierno actual: la viceconsejera Fatima Kaddur”.

Kaddur y las necesarias explicaciones
Recuerdan que fue “muy conocida por manifestarse en contra del respeto a la pluralidad cultural de la ciudad” y que ahora permite que la comida de navidad "no lleve cerdo ni alcohol, una actitud intolerable e inadmisible, que, sin embargo, nos lleva, sin remedio, a recordar sus proclamas durante la campaña electoral, en las que no tuvo empacho en reclamar el apoyo al hermano musulmán".

Estas preocupantes “derivas y actitudes intolerables e intolerantes no pueden formar parte de nuestra sociedad libre, abierta y constitucional, por lo que lo condenamos y pedimos explicaciones al respecto”, indican. Los populares, tal como ha dejado de manifiesto su presidente, Juan José Imbroda en redes sociales, piden “inmediatas explicaciones al presidente de la ciudad por esta inexplicable y preocupante actitud de deriva cultural/religiosa durante una celebración en una institución pública”.

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