El Plan de Abascal (VOX), fronteras de Ceuta y Melilla

La verdad ya no me sorprende nada, nadie sabe nada, ni se responsabilizan de nada. Me entero a través de este medio de comunicación de una nota de prensa en la que el presidente de VOX el Sr. ABASCAL propone defender en el Congreso de los Diputados el cierre total de nuestras fronteras y convertir estas dos bonitas y queridas ciudades en una “Fortaleza de la Unión Europea”.

Pero su imaginación no tiene límites, entre otras ideas, propuso un gran proyecto moderno de la ingeniería que nos dejó con la boca abierta: la construcción de “un muro de hormigón”. Si claro, con la intención de declararlo como Patrimonio Mundial, para atraer al turismo nacional. Y digo yo, por qué olvidaron de presentar ambas propuestas al Plan Estratégico y de paso llevarla como propuesta a su programa electoral para la reactivación de nuestras economías y del tejido empresarial. Moraleja: a la cama no te irás sin saber una cosa más del Sr. Abascal.

No me cuadra, cómo interpretar el Plan de Abascal, si como una locura o una burla a los ceutíes y melillenses.

Aún no se ha descubierto una vacuna para la estupidez.

Estamos perdidos por la ignorancia supina de nuestra realidad en torno a decisiones que solo concierne a los ciudadanos de Ceuta y de Melilla y no a un Señor que desconoce nuestra idiosincrasia y que se plante en el Congreso de Diputados defendiendo planteamientos, tontos y más tontos.

Vox y el liderazgo tripartito (CPM, PSOE Y UNO MAS), son Compadres Políticos, ambos representan los males de Melilla, uno quiere cerrar fronteras y ciudades, los otros de capa caída y de mal en peor, llegan tarde, conscientes de la importancia vital que supone la reapertura de la frontera.

Lo deseable sería propuestas para que el gobierno invierta en una frontera, nueva, ágil, atractiva e inteligente y que sirva para mejorar nuestros comercios, supermercados, hotelería y sobre todo las arcas de nuestro Ayuntamiento, sería bueno para nuestro futuro y nuestro presente.

Muchas fronteras se cerraron, pero ninguna tanto tiempo y con una Aduana Comercial atrancada.

El planteamiento de Abascal de cerrar nuestras fronteras, de aislarnos más de lo que estamos no es protegernos, es una amenaza que provoca un daño irreparable a la imagen de ambas ciudades. Defender a Ceuta y Melilla, señores de Vox es tener propuestas claras sin crear ansiedad, temor e inseguridad. Las fronteras no solo son un asunto nuestro, es un asunto de Estado y también de la Unión Europea.

Si quieren que los ceutíes y melillenses les tomen en serio sus PNL (Proposición no de Ley), sería inteligente y beneficioso, en primer lugar, aceptar que sus PLN son moralmente una canallada.

Presenten una PLN que recoja propuestas para que la Unión Europea pueda congelar ayudas a Marruecos mientras permanezcan cerradas ambas fronteras y nuestra Aduana Comercial que vulneran nuestros derechos como europeos.

Una PLN “inteligente” para recuperar un negocio que generaba 1500 millones de euros anuales.

Una PLN “sensata” con inversiones del Gobierno Central y de la Unión Europea para recuperar más de 3000 millones en pérdidas durante los dos años con la frontera cerrada.

Señores políticos nos enfrentamos a un nuevo panorama económico: el turismo de compras que puede ser el rey de nuestra economía. En el cambio lógico de nuestra relación con los turistas que vendrán con visado nada tiene que ver con el antiguo “Comercio Atípico”.

¿Cómo hacemos ver al gobierno de Melilla y al gobierno Central que la reapertura de fronteras ayudará a mejorar nuestro futuro como Ciudades Españolas?

Convoquen un Pleno con un solo orden del día:

“Reapertura de las Fronteras”.

Además, convoquen la Junta Local de Seguridad en la que participen, por supuesto, los empresarios, como parte afectada, para salir del “Pozo” en la que se encuentran nuestras fronteras. Una llamada de atención para lo que nos viene encima, con el golpe más duro para nuestra economía, no hay que dejar a Vox, radical, antisistema, ignorante de nuestra realidad actúe como la única voz que nos representa.