Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

El peor temporal en años inunda gran parte del centro y otros barrios y destroza las playas de Melilla

Melilla vivió ayer una mañana caótica con calles inundadas en diferentes barrios, pero sobre todo en el centro urbano, por las consecuencias del peor temporal en años, que obligaron a activar alertas meteorológicas por lluvias, vientos y fenómenos costeros. Tras una noche complicada, que sucedía a una jornada del lunes que ya había hecho estragos, las lluvias intensas durante toda la mañana acumularon 42 litros de agua por metro cuadrado, la mitad en solo una hora, que la red de pluviales de Melilla no pudo soportar. Los daños, aún por cuantificar, son cuantiosos y se concentran, sobre todo, en las playas, convertidas en auténticos estercoleros por todos los residuos que arrastraron tanto el Río de Oro como el fuerte oleaje.

Los cuerpos de seguridad y servicios de emergencia se tuvieron que emplear a fondo desde primera hora de la mañana para atender una gran cantidad de llamadas y ayudar, sobre todo, a la circulación de vehículos que se vieron atrapados por la altura del agua en calles que parecían ríos por cómo corría la lluvia acumulada. Algunos coches, incluso, llegaron a flotar por la gran cantidad de agua acumulada en las calles.
El servicio 112 tuvo que gestionar desde las 9.00 hasta pasadas las 14.30 horas un total de 171 llamadas por el temporal. Muchas de ellas fueron para los Bomberos, que por segunda jornada consecutiva tuvo que reforzar el personal de guardia y tuvo que hacer alrededor de 120 intervenciones, muchas de ellas concentradas durante la mañana.
Según informaron a MELILLA HOY fuentes del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios y Salvamento (SPEIS), los requerimientos de ciudadanos con problemas por el temporal fueron continuos hasta las tres de la tarde. Lo más prioritario fue atender las llamadas que afectaban a viviendas particulares por inundaciones, sobre todo. También hubo un buen número de garajes afectados por las lluvias, además de cubiertas de edificios en mal estado.

El centro, un auténtico río
Aunque las lluvias pusieron en jaque a varios barrios de la ciudad, la peor situación estuvo localizada en el centro de la ciudad, donde muchas calles se inundaron y se convirtieron en auténticos ríos. La Plaza de España, la Avenida General Macías y la Avenida de la Marina Española fueron de las más afectadas, pero también la Avenida Juan Carlos I y Luis de Sotomayor, por citar solo algunas.
Otras zonas que también se vieron muy afectadas fueron el Industrial, el Hipódromo y el Paseo Marítimo, que quedó en algunos tramos intransitable.
Los servicios de emergencia tuvieron que ayudar a muchos conductores que se quedaron atrapados por la acumulación de agua en estas calles entre las diez y las once de la mañana, sobre todo. Una hora de tromba de agua cuyas consecuencias fueron inmortalizadas en decenas de vídeos que se hicieron virales.

Daños materiales
No hubo que lamentar desgracias personales, aunque el temporal sí causó muchos daños materiales. Por ejemplo, en la zona cercana al cementerio hubo desprendimientos de muros, en los que los Bomberos también tuvieron que actuar. La carretera del Dique Sur quedó destrozada, literalmente, por el fuerte oleaje.
Otro foco de atención estuvo en el cauce del Río de Oro, donde el agua bajó con fuerza desde primera hora, arrastrando una gran cantidad de residuos que, unidos a los que trajo el fuerte oleaje, terminaron convirtiendo las playas en un auténtico estercolero. Cañas, envases y residuos de todo tipo se acumulan, sobre todo, en la playa de San Lorenzo, aunque la desoladora imagen se extendía a lo largo de toda la costa melillense.
El temporal comenzó a remitir pasado el mediodía, momento en el que las conexiones entre Melilla y la península por mar y aire empezaron a volver a operar, con algunos retrasos, después de que la ciudad se quedara incomunicada en la tarde del lunes tanto por mar como por aire.

La resaca
Fuentes de los Bomberos señalaron a este Diario que, aunque el temporal haya dado un respiro a la ciudad en las últimas horas, se esperan días de bastante trabajo por “la resaca”. Y es que, en cuanto empiecen a subir las temperaturas de nuevo, comenzarán las dilataciones de terrenos que obligarán a realizar saneamientos de fachadas y muros en mal estado.

Loading

Redacción

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€