Los miembros del jurado popular han dado a conocer este miércoles su decisión tras horas de deliberaciones después de cuatro sesiones de juicio en la sección tercera de la Audiencia de Asturias con sede en Oviedo. El fiscal solicita para el procesado 26 años de prisión, 10 de libertad vigilada, retirada de la patria potestad, pago de una multa y abono de indemnizaciones por 346.000 euros para el acusado del asesinato de su expareja y madre de su hijo en Melilla en julio de 2016. Durante su declaración en el juicio, el acusado declaró que si quedó con la víctima en Melilla era "porque quería que el niño conociese a su familia y para despedirse" de su ex pareja que sabia que iba a marchar a Ecuador y ha negado que quisiese matarla, sino que fue en un momento de discusión cuando "trató de taparle la boca para que no gritase".
Así, su defensa ha intentado demostrar en la vista que cuando el procesado dejó a su pareja en la playa de Melilla , en La Hípica, esta aun estaba con vida, ya que los forenses sitúan la hora de la muerte de la joven entre las 7 y las 8 de la mañana, mientras que las cámaras de seguridad de la zona captaron al acusado saliendo de la zona a las 5.37 horas.
Además de la acusación particular también ha estado personada en el caso la acusación popular ejercida por la Asociación Abogadas para la Igualdad que tratarán de demostrar la situación de "sometimiento" de la víctima hacia el acusado.
