El doctor Justo Sancho-Miñano encabeza la candidatura a presidir el Colegio de Médicos de Melilla y presenta como avales la experiencia demostrada por quienes componen la lista. Además, se compromete a metas realistas y a defender los intereses de los colegiados. El ginecólogo melillense señala que Melilla debe declararse, por sus características, como ciudad de difícil desempeño para la atención sanitaria. De hecho, afirma que no hay suficientes recursos humanos en la sanidad pública melillense para afrontar las necesidades presentes, y que si no se fideliza a los profesionales “nos encontraremos en breve en una situación mucho peor”.
- La actual Dirección del Colegio de Médicos de Melilla ha dimitido al no poder atender sus obligaciones por la crisis del Covid ¿ya tiene decidido presentar su candidatura? ¿Por qué en un momento tan complicado como este?
- Sí, no sólo lo tenemos pensado, sino que, de hecho, hemos presentado la candidatura a la Presidencia del Colegio de Médicos de Melilla. ¿Por qué en un momento tan complicado? No hemos mirado si el momento es complejo o fácil, no nos hemos planteado si vamos a favor o a contracorriente. La verdad es que las cosas están difíciles y quizás ahora es el momento de dar la talla y no esconderse.
- La institución colegial suma tiempos convulsos en estos últimos años, primero con la salida abrupta del anterior presidente Jesús Delgado Aboy por presuntas irregularidades, que iban a acabar en los juzgados; la dimisión seis semanas después de su sucesor, Mohamed Benazzouz, tras hacerse público que iba a ser investigado por la muerte de una paciente y ahora la marcha de la directiva presidida por María Asunción Rojas al no poder asumir sus obligaciones por la carga de trabajo provocada por la pandemia. Con estos antecedentes, no parece que este sea un cargo fácil.
- Reconozco que la institución ha pasado por tiempos convulso y no hemos estado, precisamente, en la boca de la gente por cosas buenas, pero no vamos a entrar en eso que es pasado, y también porque pasará lo que tenga que pasar judicialmente. No entramos en eso, ni salimos. Evidentemente el cargo no va a ser fácil, ni tampoco estamos para lucirnos en cosas fáciles.
Si salimos elegidos, vamos a intentar trabajar en cuatro o cinco cosas que consideramos relevantes y que nadie se engañe, porque este es un colegio de médicos de una ciudad pequeña, de un pueblo con pocos colegiados, y tenemos que intentar que el colegio sea útil. No hay que pensar en grandes proyectos, sino en cosas que sirvan a los colegiados, en reivindicaciones, en ser la voz del colectivo médico para demandar a las autoridades sanitarias lo que creemos que es justo.
- A todo esto, hay que sumarle la presión asistencial y por tanto el mayor trabajo que padecen los facultativos melillenses por la pandemia del Covid-19. ¿No le parece que son muchos obstáculos en el camino?
- La pandemia ha traído un aumento de la presión asistencial, en especial en servicios comunes como laboratorio, rayos, urgencias, etc., pero el cierre de la frontera de Marruecos, especialmente a ginecología, nos ha dado un respiro que es lo justo. Ahora nos faltan el 70 por ciento de los partos que antes se realizaban, y tampoco era normal lo que estábamos atendiendo antes del covid.
- ¿Quiénes serían las personas que le acompañaría en esta “aventura” para las elecciones del 17 de diciembre?
- Para la vicepresidencia contamos con la doctora Emma Navarro Guerrero; como secretario el doctor Cesar Feliú Serrano; como vicesecretario Jesus Romero Imbroda, y como tesorero el doctor Ahmed Boubnane. Somos una junta directiva que romper un poco con lo que había antes. Somos gente joven, y venimos con muchas ganas de trabajar. Las vocalías también las tengo claras, pero no las voy a desvelar por ahora.
- ¿Por qué un médico de Melilla debería votarle?, ¿cuáles son sus propuestas?
- No voy a pedir el voto. La gente, mis compañeros, me conocen, saben cómo soy y no hace falta que yo les diga cómo voy actuar , ni creo que a los compañeros que me acompañan vamos a descubrirlos, porque esta es una ciudad pequeña y nos conocemos todos, y si alguien quiere un cambio con respecto a lo que había antes, creo que vamos a ser nosotros. Pero no vamos a pedir el voto. La gente ya nos conoce lo suficiente como para saber cómo podemos responder, y si no lo hacemos así, yo sería el primero en irme porque no tengo apego a ningún sillón.
- Melilla ha estado varios días como primera región española en tasa de contagios por coronavirus, pero ahora ha ido bajando la misma. A ello hay que sumarle lo ocurrido con la revisión de datos que ha hecho que los casos se hayan reducido en 500 porque INGESA no los había notificado a la Consejería de Salud Pública ¿Cómo valoraría la gestión de la pandemia en Melilla? ¿Hay coordinación entre las administraciones central y local?
- No vamos a entrar en cuitas políticas de cómo desaparecen 500 personas de las listas en forma de curados y las desafortunadas declaraciones del consejero echando tierra encima a mis compañeros de Atención Primaria que bastante están haciendo. Me remitiría, para contestar a esto, a ese evento político tan desafortunado, al comunicado que ha hecho el Sindicato Médico en redes sociales que me parece absolutamente extraordinario y está en sintonía con lo que es el colectivo del Colegio de Médicos.
Evidentemente las cosas no han ido bien, y por tanto tampoco es muy arriesgado decir que quizás se tendría que haber adoptado otras medidas que, por cierto, veníamos reclamando desde hace mucho tiempo como son los confinamientos selectivos o aislar los focos. Con haber hecho eso y hacer cumplir lo más básico, a lo mejor no estaríamos como estamos, pero a veces en esta ciudad cuesta mucho hacer cumplir lo más sencillo y luego tenemos que matar moscas a cañonazos.
- Usted es médico ginecólogo y también ha tenido su experiencia en política, ¿se ha contado lo suficiente con los profesionales para la adopción de las medidas?, ¿qué papel puede jugar en situaciones como la que vivimos el Colegio de Médicos de Melilla?
- En estos momentos está todo muy a flor de piel y parece muy evidente que tendrían que hacer caso a los profesionales sanitarios y en una situación como la que estamos viviendo, ni siquiera hay un comité de expertos al que seguir y ni se consulta o hace caso a los sanitarios, sino que como pasó en septiembre, se nos tachó de alarmistas y se rieron en nuestra cara.
Creo que a los políticos les iría mejor si hicieran caso a los sanitarios en cuestiones de sanidad, a los militares en cuestiones del Ejército, o a los maestros en temas educativos. Les iría mejor, pero no sé qué tienen que no lo hacen.
- Sobre la situación sanitaria de Melilla, ¿cree que los médicos que tenemos en la ciudad son suficientes?, ¿deberían ser mayores los estímulos para atraer a profesionales de otros puntos del país?
- No hay recursos humanos suficientes en la ciudad y ya se está viendo, que no hay ni médicos, ni auxiliares, ni enfermeros, no hay. Lo llevamos reivindicando mucho tiempo. Las plantillas son cada vez más viejas y la gente se va a ir yendo o jubilando porque cada vez el incentivo es menor. Queda claro que o incentivamos, fidelizamos a la gente que está aquí o nos podemos encontrar en una situación muchísimo peor en no mucho tiempo. También lo hemos advertido y vamos a ver qué pasa.
- Por último, si quiere comentar alguna cosa más, este es el momento.
- Simplemente insistir en que somos un equipo joven que quiere presentar su candidatura, que quiere hacer cuatro cosas, pero hacerlas bien, e intentar beneficiar a nuestros compañeros colegiados en Melilla.
- A nivel nacional, todos los colegios de Médicos España, salvo el de Cataluña, han pedido el cese del director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias, Fernando Simón, "por su incapacidad manifiesta y prolongada a lo largo de la evolución de la pandemia" y por su velada crítica a médicos que no se cuidad frente al Covid ¿qué opinión puede darnos al respecto?
- Todos los colegios han mostrado su desacuerdo con la gestión de Fernando Simón en la pandemia. Nosotros estamos en esa línea y nos gustaría que dimitiera, no sólo por cómo ha gestionado la crisis, sino también por la poca sensibilidad que ha mantenido con el colectivo médico insinuando que los médicos se contagian en reuniones familiares. Claro, los que se contagian en los hospitales son los políticos, cuando en realidad les cuesta tanto ponerse un pijama y visitarlos.
- Melilla es, junto con Ceuta, la única región de España que no tiene transferida la competencia de Sanidad, ¿qué le parece esta situación y su dependencia directa del Ministerio de Sanidad en Madrid? ¿Qué valoración hace de la gestión del INGESA?
- Dependemos directamente del INGESA y el INGESA está muy lejos, no solo por la distancia física, sino también en el sentimiento. Da igual el color político que protagonice la Dirección de INGESA, que el resultado con Melilla, a nuestro juicio, siempre ha sido nefasto. Todas nuestras reivindicaciones han ido cayendo en saco roto, mediando muchas tomaduras de pelo y muchas mentiras siempre por parte de quien ha protagonizado el INGESA en Madrid, y evidentemente, no estamos contentos.
Nosotros queremos ser la voz de los compañeros y reivindicar lo que consideramos que es lo justo, no sólo desde el punto de vista económico como las horas de guardia y demás, sino también desde el punto de vista laboral para que Melilla sea declarada lugar de difícil desempeño, porque es evidente que hay que hacerlo. La gestión del INGESA es regular, pero no ahora, sino durante años.
