El Melilla Baloncesto se reencontró ayer con el triunfo en su visita a A Coruña, después de un encuentro de alternativas, sobre todo en la primera mitad. Tras el descanso, los melillenses fueron siempre por delante en el luminoso, llegando a disponer de una renta de hasta 14 puntos que, sin embargo, a punto estuvieron de dilapidar ante un rival mas acertado en los lanzamientos triples que puso en apuros a los visitantes hasta el final.
El Melilla Baloncesto se reencontró ayer con el triunfo en su visita a A Coruña y lo hizo sufriendo (72-76), después de un encuentro de alternativas, sobre todo en la primera mitad. Tras el descanso, los de Alejandro Alcoba fueron siempre por delante en el luminoso, llegando a disponer de una renta de hasta 14 puntos que, sin embargo, a punto estuvieron de dilapidar ante un rival mas acertado en los lanzamientos triples que puso en apuros a los visitantes hasta el final.
El decano necesitaba ganar para no seguir bajando puestos en la tabla y saltó a la pista del Palacio de los Deportes muy enchufado, aunque el Leyma Coruña tampoco podía permitirse un nuevo tropiezo y plantó cara anulando las primeras ventajas visitantes con dos triples consecutivos de Miso (13-8). Reaccionaban los de Alcoba apretando en defensa y buscando posesiones largas que le llevaban a firmar un parcial de 0-12 para colocar en el electrónico un claro 13-20, a 2’20” para el término del primer cuarto. Pedía tiempo muerto el técnico local, que pese a todo no conseguía enjugar diferencias (20-27, minuto 10).
El juego se igualaba en el inicio del segundo acto, con dos equipos que ponían todo sobre la pista. El ritmo era frenético, y el choque se tornaba de ida y vuelta, aunque el Melilla Baloncesto conseguía mantener su renta y, a falta de 7’09” para el descanso, obligaba al técnico local a solicitar un tiempo muerto (24-36).
El Leyma Coruña intentó hacerse fuerte en defensa para frenar a su rival y durante tres minutos secó por completo el juego ofensivo de los visitantes, que no volverían a anotar hasta dos tiros libres de Jesse Chuku. Los locales parecían meterse en el partido con cuatro triples consecutivos que le acercaban en el luminoso (36-40, a 1’21”). Pero en la recta final de este periodo los melillenses firmaban un parcial de 0-6 que les permitía irse de nuevo hasta los diez puntos de ventaja (36-46).
Tras el descanso uno y otro equipo parecían haberse quedado en el vestuario. Locales y visitantes andaban perdidos en la cancha, corriendo como ‘pollo sin cabeza’, cometiendo imprecisiones tanto en ataque como en defensa. Y así, el marcador no se movió hasta que Miso, a 6’40” para el final del cuarto, convertía un lanzamiento de tres para los locales (39-46). Por parte del decano era Txemi Urtasun el que rompía la sequía casi un minuto después, justo antes de que Chuku anotase desde la línea de 6’75, dando otra vez un respiro a los de Alcoba (39-51).
A partir de ahí el encuentro entró en una fase de intercambio de canastas que permitía al Melilla Baloncesto a mantener su renta, aunque no sin sufrimiento (46-60, minuto 28). Pero el Leyma supo jugar sus cartas, forzando personales y aprovechando sus tiros libres para ir acercándose en el luminoso. Una reacción que culminaba Sabin con una canasta a cuatro segundos del final del tercer periodo que dejaba a los locales a siete puntos (55-62).
Estaba por ver si el decano iba a lograr aguantar la intensidad en los diez minutos decisivos. Y de entrada los de Alcoba se mantenían firmes atrás (57-68, a 6’33” del final), pero un parcial de 5-0 obligaba a Alcoba a parar el choque a punto de llegarse al ecuador del cuarto (62-68). A la vuelta, Stephens, de tres, apretaba aún mas el electrónico (65-68, minuto 36). Nuevo tiempo muerto del técnico melillense tras el cual un triple de Stephens y una canasta de Urtasun daban aire a los azulones (65-73, minuto 37). Pero Bulic, con cinco puntos seguidos, ponía emoción a la recta final (72-73, a 1’24” de la conclusión). Jesse Chuku anotaba, el decano aguantaba en defensa y Txemi Urtasun, con un lanzamiento desde la línea de personal, sentenciaba el triunfo de un Melilla Baloncesto que ayer demostró capacidad de sufrimiento en A Coruña.
Gustavo Aranzana: “Fue una pena no poder culminar la remontada”
El entrenador del Leyma Coruña incidió en que su equipo “peleó y fue una pena que al final no pudiéramos culminar la remontada. Creo que el Melilla Baloncesto nos hizo sufrir en algunas fases del encuentro, pero no nos rendimos nunca y en el último cuarto apretamos mucho en defensa y les hicimos sufrir, aunque al final no pudo ser”, aseguró Gustavo Aranzana.
Alejandro Alcoba: “Estoy contento porque el equipo supo aguantar”
El técnico del Melilla Baloncesto reconocía sentirse “contento”, porque “el equipo supo aguantar al final, aunque sufrimos. Durante tres cuartos hicimos un gran baloncesto. Jugamos al ritmo que queríamos, con una intensidad muy alta en defensa, no dejando correr a Coruña, con buena concentración… En ataque, también estuvimos bien, con una buena lectura del juego y fluidez. Pero luego el último cuarto fue un ‘Déjà vu’ de lo que pasó en el anterior partido en casa contra el Huesca”, recordó.
Alejandro Alcoba cree que su equipo “se paró y cometió demasiados errores, ademas, el Leyma Coruña mejoró mucho en defensa y se metió en la contienda. Pero al final supimos gestionar la ventaja que teníamos. La pena es que pienso que sufrimos demasiado para el buen encuentro que habíamos hecho durante 35 minutos. Hay que tener más buena toma de decisiones al final, tener la cabeza fría y saber jugar con el marcador y el tiempo”, apuntó.
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El decano sabe ganar sufriendo (72-76)
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