Los trabajadores de la seguridad privada se han concentrado este viernes frente al Palacio de la Asamblea para denunciar “la precariedad” que existe en el sector, así como de las últimas “agresiones” y “vulneración de derechos fundamentales” que vienen sufriendo los trabajadores del sector.
En declaraciones a los medios, Francis Aguilera, miembro del Comité de Empresa del Grupo Sureste Seguridad, ha denunciado que “se está consintiendo” por parte de “grandes clientes”, como la Ciudad Autónoma o el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA) que “se incumplan” los pliegos de condiciones del servicio de seguridad privada.
“Lo que antes era una cosa anormal, ahora es la normalidad”, lamenta Aguilera, que señala que las últimas agresiones que han sufrido trabajadores de la seguridad privada en el Hospital Comarcal como en el Centro de Menores de La Purísima se deben a “carencia de medios y seguridad”.
“Se está escatimando en seguridad, y eso es realmente lo que venimos a reivindicar”, señala, pidiendo que no se permita a las empresas que “se salten” los pliegos de condiciones de una forma “tan alegre, porque no tiene consecuencia”. “La única consecuencia es la física y la de poner en peligro al ciudadano que está custodiando”, señala, apuntando que en el Hospital Comarcal hacen falta vigilantes de seguridad, sobre todo por la madrugada. “Si ocurre algo ahí, no podrán esperar que la seguridad sea eficiente”, afirma, insistiendo en que “no se escatime ni en seguridad, ni en uniformidad, ni en arreglo de cámaras y en un montón de cosas”.
Así, pide a esos “grandes clientes” como a la Ciudad Autónoma como al INGESA a que sean “un poco más estrictos” a la hora de exigir “eficiencia” a la empresa que, por el momento, “no está siendo eficiente de esta manera”. “Reivindicamos que se acabe la precariedad que está sufriendo el sector y que, además, que no se escatime en seguridad por parte de los clientes y que, al final, deriva en cosas como las de La Purísima o la del Hospital Comarcal”, afirma.
A preguntas de los periodistas, Aguilera ha explicado que el “verdadero problema” que tiene Grupo Sureste Seguridad es que el Comité de Empresa “no sabe ni cuántos trabajadores tiene”. “Se está vulnerando permanentemente la información a los trabajadores del Comité. Y la ley dice que debemos saberlo y saber, también la lista y el orden en el que se van llamando y por qué. Y aquí no hay nada de eso”, critica, asegurando que esta problemática se extiende “a todas las empresas”.
Sobre La Purísima, informa que ya han instalado una barrera de acceso al recinto, por lo tanto, ya no se puede acceder al mismo “alegremente”; y han instalado una línea telefónica fija, ya que en esa zona no hay cobertura.
Niega que hayan vuelto a producirse incidentes en el centro y avanzan que ya se está tramitando que uno de los menores “más problemáticos” pueda salir del centro a otro específico para tratar “su problema”.
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