El AMPA del CEE Reina Sofía denuncia el “maltrato negligente” que las instituciones realizan hacia los alumnos del centro

Su presidente, Joan Casares, afirma que desde que se crearon las “nuevas rutas” de autobús escolar los niños con problemas de salud tienen que estar en “paradas específicas” a una “hora intempestiva” y “pasando frío”

La Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del Colegio de Educación Especial (CEE) Reina Sofía denuncia que se está ejerciendo un «maltrato por negligencia institucional» hacia los alumnos del centro educativo por parte del Ministerio de Educación «en connivencia» con la Dirección Provincial de Educación en Melilla. Esto se debe a que, según afirma su presidente Joan Casares, se han creado «nuevas rutas» por las que tiene que pasar el autobús escolar con «paradas específicas» para los niños discapacitados o con problemas de salud en las que tienen que estar a las 07:30 de la mañana. «Están perjudicando a nuestros niños haciendo que pasen malos momentos como levantarse a una hora intempestiva y estar pasando frío esperando el autobús que llega o no llega y que puede tener muchos problemas», afirma Casares, quien lamenta que dicho maltrato «se ha enquistado» y que «nadie puede ofrecer» una solución al respecto.

Casares afirma además que con este maltrato están «incumpliendo» la ‘Ley 443/2001 sobre condiciones de seguridad en el transporte escolar y de menores’, en la cual sostiene que «ningún niño a ninguna hora puede pasar más de una hora dentro del autocar». «Si lo recogen a las 07:30h y tienen que entregarlos a las nueve, ¿qué está sucediendo ahí? Si es que los entregan antes y el colegio no está abierto, ¿quién se está haciendo cargo de los niños», pregunta retóricamente, afirmando que  «nadie» les responde y que se ofrecen «pocas soluciones».

«Siempre el eslabón más débil de la cadena es el que sufre, y en este caso son los niños discapacitados de Melilla, los cuales están sufriendo mucho por la desidia y la falta de soluciones», declaró Casares, quien exige soluciones inmediatas que no lleve a «situaciones de padecimiento y estrés» a los niños.

Ante este panorama, el presidente del AMPA del Reina Sofía pide a los 25 diputados de la Asamblea de la Ciudad, a los dos senadores y al diputado nacional a que consideren «seriamente» la posibilidad de denunciar al Ministerio de Educación, ya que aclara que no se trata de un tema político, sino social. «Este tema ha estado igual de mal con otros gobiernos», aclara, lamentando que al final «todo el mundo se encoje de hombros» y no pueden hacer nada.

Un autobús «insuficiente» para el servicio

Además de esto, Casares explica que el autocar que adquirieron la COA (Cooperativa Omnibus de Autobuses) y al MEC no era «suficiente» para el servicio por «una cuestión de matemáticas». «Ese autocar tiene que llevar a cerca de unos 35 niños de nuestro colegio y de varios centros como el CEIP León Solá, al Juan Caro o el Anselmo Pardo y solo tiene sitio para ocho sillas de ruedas. Entendemos que de esos 35 niños entre 18 y 24 llevan sillas de ruedas, es absolutamente imposible cumplir los horarios y cumplir los tiempos», explica.

Una madre denuncia la situación por la que pasó su hijo ayer: “Está preparado desde muy temprano, pero me niego que se vaya de noche y con un frío increíble”

Camelia, una madre cuyo hijo acude al CEE Reina Sofía y que necesita de un cuidado especial, también quiso denunciar la situación de “maltrato” por la que atravesó ayer cuando tuvo que llevarlo al colegio. “Mi hijo está preparado desde muy temprano, pero me niego que se vaya de noche con un frío increíble, y le pregunto al señor del autobús y me dice que confíe que va a dejar al niño con la cuidadora, pero la cuidadora no conoce a mi hijo. La cuidadora lleva poco tiempo”, afirma, contando que su hijo tiene “problemas respiratorios”, “come con máquina” o no puede vomitar. “Al final lo he traído yo, pero yo no lo puedo traer todos los días porque tengo más hermanos que van al cole con otros horarios y me es imposible”, asegura, relatando que la secretaria del colegio le comentó que no hay soluciones. “Nadie puede hacer nada. Ni unos ni otros”, lamenta.

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