El sindicato CSIF manifestó ayer su “gran preocupación” ante “la insostenible situación” que, a su juicio, hay en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), que sufre un brote de coronavirus por el que Salud Pública pidió sin éxito a la Justicia que diera autorización para su confinamiento.
En una nota de prensa, CSIF exigió que se adopten las necesarias medidas preventivas para proporcionar las suficientes garantías de protección y seguridad a los trabajadores, entre ellas, que se le hagan las pruebas PCR de detección de la COVID-19 a todo el personal “para una mayor tranquilidad del centro”.
De esta manera, según el sindicato, se evitaría que “todo ello pueda derivar a una situación más límite de la que ya está instalada el centro, que sea difícil de remediar”.
Asimismo, pide un plan de contingencias, una “actualizada y adecuada” evaluación de riesgos y un refuerzo de personal y la cobertura de vacantes. También solicita la adecuación de los puestos de trabajo instalando dispositivos de mamparas de protección, en aquellos espacios donde los trabajadores realizan la atención directa y al público.
«Todavía estamos a tiempo de ofrecer soluciones a la desidia e inacción que, desde hace tiempo, por parte de la Administración, viene dando por respuesta», asevera.
