Una de las melillenses afectadas por el coronavirus, Begoña Pardo, ha emitido un mensaje en las redes sociales para pedir que se controlen a los positivos con COVID-19 en Melilla. "No basta con quedarse en casa, no me vale", ha advertido esta enfermera de profesión, cuyo marido también está afectado por esta enfermedad y que se encuentra en la UCI del Hospital Comarcal desde el pasado viernes 20 marzo, en estado grave.
Begoña Pardo ya protagonizó otra acción cuando exigió que a la empleada de hogar de su casa también se le hiciera la prueba del coronavirus, la cual ha dado un resultado negativo, al igual que la prueba de una de las hijas del matrimonio infectado, que tiene 16 años. Sin embargo, la madre de Begoña, de 87 años, sí ha dado positivo, aunque sin síntomas.
Begoña Pardo explicaba en su vídeo que había recibido una llamada del 061 para interesarse por su estado pero que, cuando le preguntaron cuándo recibiría el alta, le respondieron que aún no estaban los protocolos “y cuando me terminen los síntomas, que ya no infectaré”. “¿En qué país estamos? ¿Así es como solucionan nuestros dirigentes esta pandemia a la que estamos expuestos?”, se pregunta.
