La Fiscalía pide una multa de 5.400 euros, 4 años sin poder conducir y una responsabilidad civil de 2.210 euros a un hombre por un delito contra la seguridad vial y otro de lesiones al atropellar a una joven tras una fiesta de Nochevieja en la zona de la circunvalación. La perjudicada aseguró que el coche le dio un fuerte golpe y cayó al suelo causándole un esguince en el pie derecho y varias contusiones. La defensa pide la absolución de su cliente ya que el resultado del test de alcoholemia no superaba el 0,60 mg/l y se encontraban en una carretera sin iluminación apuntando que la víctima “no actuó con prudencia”. Los hechos ocurrieron el 1 de enero de 2017, según Fiscalía, cuando la joven salía de una fiesta de Nochevieja en un local de la circunvalación y fue golpeada por un coche, cayó al suelo causándole un esguince en el pie derecho y varias contusiones en el codo.
Declaraciones
La víctima en la vista explicó que se salía de la fiesta por un callejón y un coche le golpeó, se cayó al suelo pero sus amigas cogieron la matrícula y se fijaron en el chico que conducía. Llamaron a la ambulancia y a la Policía y encontraron el vehículo y al supuesto autor de los hechos.
A las preguntas de la defensa, expresó que estaba de espaldas y que no pudo ver al vehículo que le golpeó. Además, afirmó que la calle estaba iluminada y que el coche salió del recinto junto a una gran multitud de gente.
Uno de los policías resaltó que acudieron por varios atropellos en ese día y se ratificaba en el informe policial ya que no recordó si el acusado estaba en estado de embriaguez. También, apuntó que se trataba de un recinto privado y que la iluminación era insuficiente.
Otro agente que actuó en el caso señaló que recuerda que les llamaron y ella le señaló cómo era el vehículo y le dieron el alto, reconoció al acusado como el autor de los hechos y las personas que lo vieron también. En este sentido, sostuvo que la vía estaba suficientemente iluminada y el investigado estaba bajo la afluencia del alcohol por la euforia, alitosis y verborrea.
El policía que realizó la prueba de alcoholemia al acusado se ratificó en las cantidades que salieron al hacer la prueba. Además, manifestó que solo se basa en ello ya que los compañeros son los que “ven mejor” si están influenciados por el alcohol.
El Ministerio Fiscal ofreció una conformidad al dar positivo en el control de alcoholemia, las lesiones causadas a la víctima, el informe policial y médico.
La defensa pidió la absolución de su cliente por algunas contradicciones de la policía; el resultado fue inferior al 0,60 mg/l en una carretera sin iluminación y la víctima “no actuó con la suficiente prudencia”.
Además, la letrada subrayó que no pasó de un esguince de tobillo y una contusión, por lo que, se trata de un delito leve de lesiones y debería pagar el 50% de los 938 euros que se gastó la denunciante por los días de curación ya que la culpa fue del conductor y de ella.
En cuanto al representante de la responsabilidad civil, manifestó que no fue el alcohol el que causó el accidente porque es una tasa mínima y se encontraban de fiesta con una gran multitud de gente y tampoco le arroyó, por ello, pidió una sentencia absolutoria.
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