En dicho acuerdo, la apertura de todas las mañanas de la semana de Feria, lunes a sábado, se abrirá en “horario normal”, la apertura de comercios de lunes a jueves por la tarde, y el viernes y sábado por la tarde cerrarán
“Para compensar a los trabajadores se cerrarán los comercios de estas cuatro tardes, los días 24 y 31 de diciembre por la tarde, y se compensará a los trabajadores con otras dos tardes o un día libre”, explicó el presidente de la Asociación de Comerciantes (ACOME), Enrique Alcoba, quien ve en los consumidores los más “beneficiados” de dicho acuerdo. Por otro lado, Alcoba lamentó que UGT “se excusara” y no haya querido firmar el acuerdo con excusas “injustificadas”. “No hay que perjudicar a los trabajadores, pero tampoco entiendo que haya que perjudicar a la empresa cerrando una semana cuando no es necesario ni hay Feria”, razonó Alcoba. En ese caso, agradeció la “predisposición” de Comisiones Obreras desde el principio para conseguir un acuerdo.
El presidente de la Asociación de Comerciantes de Melilla (ACOME), Enrique Alcoba, afirma que con la prorroga de este acuerdo se ha tratado de no perjudicar ni a la empresa ni a los trabajadores.
“No entendemos que se cumpla un convenio de Feria cuando no hay Feria y cuando no se perjudique a nadie y el único que se beneficia es el consumidor”, añade Alcoba, quien no le ve sentido a que se cierre una semana entera cuando no hay Feria este año.
Por su parte, el secretario general de Comisiones Obreras (CC.OO.) en Melilla, Francisco López, asegura que con este acuerdo se compensa “con un día o dos tardes” a aquellos comercios que quieran cerrar en los días de Feria “ pueden cerrar por las tardes “sin ningún problema”.
“No está obligado porque puede compensar a los trabajadores siempre que haya acuerdo con los trabajadores y empresarios cerrar las semanas de Ferias si lo quiere hacer o, hemos garantizado que si está abierto se compense en otros momentos”, afirma López, quien recuerda que el motivo que les llevó a sentarse a negociar dicho convenio fueron las situaciones que se encontraron en 2018 y 2020, cuando impusieron varias denuncias en las inspecciones de trabajo ante intentos de reapertura de comercios.
No entiende la postura de UGT por no sentarse a negociar
Asimismo, López critica la postura que ha tenido el sindicato UGT en este asunto, el cual no ha aceptado negociar con ellos.
“Venir a negociar no quiere decir que tengan que aceptar lo que se pongan en el acuerdo, sino venir a representar en las mesas en las que se nos convoquen”, aclaró López, quien recuerda que en 2018 UGT firmó un acuerdo con esta “misma vía de transición” con CC.OO. y el responsable del Centro Comercial Murias.
En definitiva, el representante de CC.OO. en Melilla se muestra “conforme” con el acuerdo porque “se van a beneficiar muchos trabajadores que estaban de vacaciones” de tener las “compensaciones” que se plasman en el acuerdo.
“Es más fácil estar en la barrera, porque va a haber gente a la que le va a gustar y a gente que no”, sentenció López.
UGT acusa a ACOME y CC.OO. de tirar el convenio de comercio “por los suelos” y dejar “sin derechos” a los trabajadores
En un comunicado remitido a los medios, la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de la Unión General de Trabajadores de Melilla se muestra “totalmente en contra de arrebatar derechos a los trabajadores” ante lo que han denominado como un “pseudoacuerdo”. “Intentan hacer creer que tienen la representatividad en el sector aunque, por supuesto impugnaremos, ACOME no representa a todo el comercio y en cuanto a la parte sindical UGT es mayoritaria, por lo que lo que se firma es un acuerdo de minorías”, ha criticado el sindicato, quien se muestra reticente a reconocer la “legalidad” del acuerdo y afirma que “algunos tendrán que dar explicaciones a los suyos”, en aparente referencia a CC.OO. Asimismo, UGT asegura que no se puede modificar el artículo de un convenio mediante un acuerdo, ni variar esos días ya que, según afirman, “están tasados por la misma norma”. “Ya se incumplió el anterior acuerdo de la cafetería, ya que la mesa se debió convocar en febrero del 2021 y quisieron convocarla con prisas y corriendo en seis días el 23 de junio. Pedimos que se convocase con más tiempo y ni se nos contestó. ¡Juegan con los tiempos y con los trabajadores de Melilla!”, denuncian.
