84-71. El Melilla Baloncesto comienza la liga con buen pie

Reportaje gráfico: José Manuel Giner

Serhii Pavlov y Pavlo Krutous fueron los más destacados ante el Clínica Ponferrada 

El Club Melilla Baloncesto, con la baja por lesión de Javi García, se imponía este domingo al Clínica Ponferrada, en el primer encuentro oficial de su historia en la Segunda FEB (antigua LEB Plata), por el resultado de 84-71.Chandler Jacobs inauguraba el marcador de un cuarto con alternativas y que dominaban los visitantes, por 13-14, a cuatro minutos del final. Los de Mikel Garitaonandia contestarían con un 9-0 para situarse ocho arriba (22-14), pero un tiempo muerto del técnico visitante sirvió a los suyos para meterse en el choque y recortar hasta el 22 a 20, a falta de 38 segundos para el término de un periodo que, tras un 2+1 de Morgan Stilma, concluyó con 25 a 22. El segundo acto comenzó con un 4-0 que nacía de manos de los locales Serhii Pavlov y Víctor Moreno para poner a los suyos 29 a 22. La rápida reacción de los del Bierzo no se hizo esperar y volvían a la carga para poner las tablas a 29, pasados cuatro minutos, lo que llevó a Mikel Garitaonandia a parar el duelo para ajustar el juego de su equipo. Un triple del visitante Samar daría ventaja al Ponferrada, pero un 2+1 de Ezekiel Alley dejaba todo de nuevo equilibrado. Este asalto se cerraría con Pavlo Krutous anotando bajo el aro y situando en el luminoso un +8 (47-39) a favor de los azulones, después de un tanteo de 22 a 17.

El paso por los vestuarios llevó a ambos conjuntos a salir con intensidad a la cancha del ‘Javier Imbroda’, siendo los bercianos los que golpearon primero con dos puntos de Moller, pero el Melilla Baloncesto, con una mayor intensidad defensiva, lograba ampliar distancias al subir el 56 a 43 al luminoso. La reacción visitante llegaría con un 0 a 5 para recortar hasta el 56 a 48. No obstante, Serhii Pavlov rompía el parcial visitante con dos tiros libres y una canasta más, lo que unido a una buena acción defensiva, hacía que los melillenses se colocarían con una renta de diez puntos, ampliada a catorce (67-53) al término del tercer cuarto. En el último periodo, el Melilla Baloncesto llegó a marcharse de hasta 17 puntos (77-60), aunque el Ponferrada llegaría a rebajar a nueve (78-69), a 2”. El susto quedó ahí, porque dos triples de Chandler Jacobs sentenciaban la contienda hasta el definitivo 84-71.

Acceda a la versión completa del contenido